Te has quedado en paro por primera vez y no lo esperabas. ¿Cómo afrontar esa hoja en blanco de hacer un CV?

Si acabas de perder tu puesto de trabajo, puede que te encuentres en una encrucijada en la que no sabes qué camino tomar, especialmente si nunca has estado en paro con anterioridad o si estás ya en la edad madura o la has sobrepasado.

En cualquier caso, el primer paso que has de dar es elaborar un currículum que destaque tus potencialidades. Pero ¿cómo afrontar, por primera vez, la realización de tu CV? ¿Cómo elaborar un buen historial si ya ha transcurrido más de una década desde que redactaste el último?

En las siguientes líneas te lo explicamos:

Haz un esquema previo de tus conocimientos, experiencia, habilidades y logros profesionales

Piensa en tus logros y habilidades. ¿Qué has hecho en tus trabajos anteriores que te haya hecho destacar? ¿Qué competencias tienes que puedan ser útiles para el puesto al que aspiras?

A este respecto, intenta ser específico y, sobre todo,  cuantifica tus logros profesionales anteriores. Por ejemplo, en vez de comentar que “durante mi gestión comercial mejoró la cuenta de resultados”, detalla que “en un solo año, los beneficios de la empresa aumentaron un 20%”.

Sé breve y claro

Un buen CV debe ocupar de una a dos páginas como máximo. Para conseguir ese objetivo:

  • Evita incluir información irrelevante o redundante
  • Usa frases cortas y directas, con términos que impliquen acción y que estén relacionados con el puesto
  • Cuida al máximo tu ortografía y tu gramática

Adapta tu CV a cada oferta de empleo

No envíes el mismo CV a todas las empresas. Esto es lo que debes hacer para adaptar tu currículum a cada oferta de trabajo:

  • Investiga sobre la empresa y el puesto al que optas, modificando tu CV para que aparezcan en primer lugar aquellos aspectos que más se ajustan a lo que el empleador busca.
  • Usa un lenguaje parecido al empleado por el reclutador y utiliza las palabras clave que aparecen en la oferta.

Elige un formato y un diseño adecuados para tu CV

Dependiendo de tu experiencia y de la oferta de trabajo, puedes optar por un formato cronológico, funcional o combinado.

  • El formato cronológico es el más común y consiste en ordenar la experiencia de más reciente a más antigua.
  • El formato funcional se centra más en tus habilidades y logros que en el tiempo.
  • El formato combinado es una mezcla de los anteriores y te permite resaltar lo más relevante de tu perfil.

Nuestra recomendación es que emplees un formato de CV combinado.

En cuanto al diseño, busca un equilibrio entre lo formal y lo creativo. Puedes usar colores, iconos y elementos gráficos para hacer tu CV más atractivo, pero sin exagerar ni distraer la atención del contenido.

Utiliza una aplicación web para elaborar el mejor CV

¿Tu fuerte no es la redacción ni el diseño? ¿Piensas que no eres capaz de redactar un CV que destaque por encima de los de otros candidatos? Entonces, utiliza tu buscador web: en internet dispones de aplicaciones específicamente diseñadas para este fin.

En este sentido, nos permitimos recomendarte CVapp, una herramienta de uso intuitivo y sencillo que te permitirá elaborar un currículum perfectamente estructurado y que destaque visualmente, en cuestión de minutos.

Además, en el portal web de CVapp dispones de decenas de consejos para adaptar tu CV a cada una de las ofertas de empleo, así como de numerosas plantillas y ejemplos de CV.