El Grupo de los Siete (G7) ha alcanzado un acuerdo histórico para establecer un código ético destinado a guiar a las empresas e instituciones que se dedican al desarrollo de sistemas de inteligencia artificial (IA). El objetivo principal de este código es reducir los riesgos asociados a esta tecnología, como la propagación de información falsa, la vulneración de la privacidad y los problemas de propiedad intelectual.
2La preocupación por regular la IA
Este acuerdo, que se presenta como un conjunto de pautas y recomendaciones, subraya cómo la discusión y la inquietud sobre la regulación de la Inteligencia Artificial se han propagado en todas las esferas a nivel internacional. La Unión Europea ha sido pionera en esta iniciativa regulatoria mediante el desarrollo de una legislación comunitaria que tiene previsto entrar en vigencia en 2026 y que incluirá prohibiciones de prácticas como el reconocimiento facial y la detección de emociones.
Vera Jourova, vicepresidenta de la Comisión Europea y comisaría de Valores y Transparencia, quien previamente elogió el código de conducta como «una sólida base para garantizar la seguridad» mientras se implementa la regulación, ha expresado su satisfacción por la adopción de este acuerdo en una publicación en Twitter. «Estoy orgullosa del papel desempeñado por la UE en el establecimiento de estándares de seguridad y gobernanza a nivel global para promover la Inteligencia Artificial confiable», afirmó.