Alguien le ha dicho a Pedro Sánchez que se parece a Brad Pitt, pero no

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se encuentra disfrutando de unos cuantos días de vacaciones. Descanso del socialista en pleno bloqueo político que no sólo no ha pasado desapercibido por su visita a Marruecos, sino también por los llamativos «outfit» del presidente del Gobierno para intentar pasar desapercibido en Lanzarote, que han provocado que muchos usuarios de las redes sociales hayan tirado de comparaciones para comentarlos.

Los resultados de las elecciones municipales y autonómicas provocaban que, apenas unas horas más tarde, el presidente del Gobierno tomara la decisión de convocar elecciones generales anticipadas. Una decisión que hacía que muchos españoles tuvieran que aplazar sus vacaciones para acudir a la cita con las urnas, celebradas en pleno verano un 23 de julio.

Celebración de las elecciones que daba un resultado muy ajustado entre ambos bloques ideológicos y, por tanto, un absoluto bloqueo político para conformar gobierno. Algo que no parece haber afectado a los principales líderes de las formaciones nacionales, que a pesar de la mala situación económica y política del país, han decidido dar un respiro a sus labores políticas para disfrutar de unas «merecidas» vacaciones.

Vacaciones que, en el caso de Pedro Sánchez, han sido de todo, menos tranquilas. Y es que el descanso estival del socialista no ha pasado desapercibido. En primer lugar, debido a la decisión de Sánchez de comenzar sus vacaciones visitando Marruecos, a pesar de las fuertes fricciones que existen actualmente entre el Gobierno de España y Rabat. Visita del socialista al país vecino que no estaba exenta de críticas de las formaciones de la oposición, así como de la ciudadanía española; especialmente, tras hacerse públicas las múltiples ayudas y subvenciones de dinero público otorgadas por el Ejecutivo de Pedro Sánchez al régimen marroquí en los últimos meses.

PEDRO SÁNCHEZ, EL «BRAD PITT» DE LA POLÍTICA ESPAÑOLA

Sin embargo, esta peculiar visita de Pedro Sánchez a Marruecos no ha sido el único momento polémico en las vacaciones del socialista en este 2023. Y es que parece que el presidente del Gobierno ha intentado pasar el resto de sus vacaciones viajando con su familia de «incógnito» por Lanzarote, con un outfit que parece haber conseguido exactamente el efecto contrario. Así pues, lejos de haberse podido mover con la libertad de un ciudadano anónimo, Pedro Sánchez se ha convertido nuevamente en el centro de atención de la vida política y de la sociedad española en las últimas horas.

Y es que a pocos les ha pasado desapercibido el estilismo del socialista en estos momentos vacacionales: una camisa con dibujos de palmeras, bermudas, y una gorra con la que Sánchez ha intentado ocultar su rostro… o, en su lugar, intentar copiar el estilo de otro rostro muy conocido a nivel internacional. En concreto, el conocido actor de Estados Unidos, Brad Pitt.

Así pues, aunque pueda sorprender a muchos, parece que el «síndrome de la Moncloa» ha absorbido casi por completo al presidente del Gobierno en funciones, que parece actuar más como una estrella de cine, que como el representante de todos los españoles. Tanto es así, que muchos han utilizado las redes sociales para señalar el fuerte parecido del «outfit» de Pedro Sánchez con el estilismo que suele utilizar el ex marido de Angelina Jolie en sus momentos de descanso entre escena y escena.

«Parecido razonable» en los estilismos que no parece haber conseguido conquistar a la opinión pública española, que no ha dudado en cargar contra Pedro Sánchez a través de las redes sociales. «Capaz es Pedro Sánchez de mirarse en el espejo y ver la imagen de la izquierda» ha asegurado, en claro tono de humor, un usuario en las redes.

Demostración del rechazo de muchos hacia el estilismo de Pedro Sánchez que no sólo parece venir marcada por las prendas escogidas por el socialista, sino especialmente, por su despreocupación de cara al país como presidente del Gobierno, a pesar de que el IPC se encuentra en preocupantes máximos, amenazando al país con una brutal crisis económica que se suma al bloqueo político que parece dejar cada vez más indefensos a los españoles, que tendrán que esperar al mes de septiembre para encontrar en sus dirigentes una solución.