Pablo Iglesias utiliza a sus seguidores como «matones» para defenderse de mensajes anónimos

A pesar de haber abandonado el mundo de la política, Pablo Iglesias permanece muy activo en defensa de los intereses de Unidas Podemos y, especialmente, cargando contra los partidos de la derecha española. Una actividad que parece haber alcanzado su teléfono móvil, en el que el ex dirigente podemita parece estar recibiendo mensajes en contra de sus afirmaciones públicas. Unos mensajes ante los que Iglesias parece haber decidido actuar a través de las redes sociales, utilizando a sus seguidores como vía para conseguir parar estos mensajes, en vez de acudir a las autoridades. Algo que podría llevar al podemita a incurrir en un delito.

Tras perder en las últimas elecciones autonómicas frente a Isabel Díaz Ayuso, Pablo Iglesias decidía abandonar todos sus cargos públicos en la política, y centrarse en su nuevo papel como «comunicador». Una decisión que, sin embargo, parece no haber sido completamente firme. Y es que, a pesar de su abandono de la política, el fundador de Podemos sigue estado muy activo en la defensa del discurso podemita, siendo muchos los que se plantean su regreso a la formación morada más pronto que tarde.

Actividad del ex vicepresidente del Gobierno, especialmente en redes sociales, que parece haber provocado que ciudadanos anónimos, que han tenido acceso al teléfono móvil del ex mandatario, hayan decidido mandarle mensajes de «ultraderecha», tal y como ha criticado Pablo Iglesias a través de sus redes sociales. «Esta gente no para de mandarme mensajes de ultraderecha al móvil» ha lamentado la pareja de Irene Montero en sus redes sociales.

Mismas redes sociales en las que Pablo Iglesias ha decidido compartir la fotografía de los rostros de esas personas que le envían mensajes anónimos, que no amenazas, buscando que alguno de sus seguidores en Twitter sea capaz de identificarlos. Una acción que, sin duda, podría generar una gran polémica entorno al ex líder de los morados.

LA QUEJA DE PABLO IGLESIAS PODRÍA SER UN DELITO

Enfado evidente de Pablo Iglesias que el ex podemita parece haber querido trasladar a sus seguidores, «utilizándolos» para intentar conseguir la identidad de las dos personas que aparecen en la fotografía. Una situación que, sin embargo, podría acabar siendo «contraproducente» para el ex político.

Y es que, tal y como señala el doctor en Derecho Víctor Cazurro para el diario 20 Minutos, «publicar una fotografía sin consentimiento puede generar responsabilidades sobre la protección del honor, la intimidad y la propia imagen».

«El problema es cuando las personas no tienen relevancia pública, no se exponen y, sin haber prestado su consentimiento, ven publicada una fotografía suya en una red social, un foro o una web, lo que supone una vulneración de su derecho a la protección de datos» subraya el doctor.

Una violación del derecho de las dos personas anónimas que aparecen en la fotografía de Iglesias que podría acabar siendo un delito denunciable, según las palabras de este doctor- Una situación que podría llevar a Pablo Iglesias no sólo ante la Agencia Española de Protección de Datos, sino también ante los tribunales.