El precio de la vivienda nueva en Madrid, prohibitivo para casi todos

Que el precio de la vivienda en España se antoja difícil ya lo sabíamos. Lo que no muchos esperaban es que en ciertos puntos de los territorios estos precios se muestren tan caros que resulten prohibitivos, ya no solo para una única persona, sino incluso para muchas familias.

Hablamos así de que el precio de la vivienda en nuestro país ha subido hasta un 5,24% en el último año, según el informe mensual de precios de venta de pisos.com. Aquí, el precio medio de la vivienda de segunda mano en España en el mes de noviembre de 2022 fue de 1.966 euros por metro cuadrado.

Esta es una cifra que supone, en mayor medida, una subida del 0,42% frente al pasado mes de octubre, cuando el precio por unidad de superficie fue de 1.957 euros. Se trata así de que el coste de adquisición de una vivienda ha crecido hasta niveles récord… y en Madrid, más.

El precio de una vivienda crece hasta niveles récord

Vemos así un resultado donde el precio de la vivienda usada ya no está a grandes alcances. Con estos datos, el precio del metro cuadrado se sitúa en 1.921 euros. Otro dato que destacan en el marketplace es que los precios se han incrementado un 1,5% desde verano.

El peor ejemplo de este síntoma se ve en Madrid, donde se observa que hay zonas como la de Alonso Martínez, en pleno centro de la capital, donde se muestra por tener el valor más caro, 12.960,53 euros el m2.

Así, los precios de la vivienda en la Comunidad de Madrid subieron un 7,6 % en el tercer trimestre del año en comparación con el mismo periodo de 2021, según los datos difundidos este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), según los cuales la vivienda nueva refleja una subida anual de precio del 6,6 % y la usada un 7,9 %.

Precio Vivienda Madrid

El coste de la vivienda nueva no para de crecer: solo cinco ciudades han reducido el precio

En el caso de la vivienda nueva, en comparación con el segundo trimestre de 2022 se produjo un incremento del 0,6%, aunque en el acumulado del año revela un aumento del 3,4%; y en el caso de la vivienda de segunda mano se da un incremento del 2,8 % en comparación con abril-junio, y un aumento del 7,4 % en lo que va de año.

Y es que según refleja este estudio, Madrid está muy lejos del resto de comunidades y ciudades, en las que hoy sólo cinco capitales han visto reducido el precio de la vivienda en los últimos 12 meses. La mayor caída se da en Palencia, seguida por las ciudades de Zamora, Jaén, Teruel y León, mientras que en Huesca se han mantenido los precios de la vivienda en el último año.

Los precios más bajos están en Castilla-La Mancha y Extremadura

Los elevados precios de Madrid, el País Vasco y Cataluña, que alcanzan los 3.122, los 2.783 y los 2.333 euros el metro cuadrado, respectivamente, contrastan con los valores que se registran en Castilla-La Mancha y Extremadura, las comunidades más económicas, con un coste del metro cuadrado inferior a 1.000 euros.

Respecto a los precios, y aunque parece poco probable que asistamos a caídas de precio generalizadas en los grandes mercados durante los próximos meses, probablemente los precios se enfriarán y tomarán una senda estable, tal y como mantienen desde la consultora inmobiliaria Activum Real Estate Consulting.

«Vivir dentro de la M-30 es un lujo»

Asimismo, la ya citada estación de Alonso Martínez destaca por tener viviendas de obra nueva con el precio más caro si se compara con lo que costaba en 2021, en lo que ha subido casi un 15,80%.

«Económicamente la región funciona bien, y eso es muy bueno, pero conlleva estos elevados precios por vivir en el centro. En algunas paradas de Metro donde el metro cuadrado costaba en 2014 unos 7.000 euros ahora, en 2022, te superan los 22.000 euros… Vivir dentro de la M-30 es un lujo«, explican.

Por último, lo que sabemos a partir de los estudios relacionados, además, es que el próximo año apunta por tanto a un nivel de precios de compra similar al de 2022 y a un acceso a las hipotecas más restringido. Eso hará porque las mejores oportunidades van a quedar para los bolsillos más desahogados y en las zonas de menor demanda de vivienda, donde los precios de compra sí podrían descender.