Bromas graciosas que son de lo más crueles

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A veces tenemos ganas de marcha, y lo que hacemos es gastar una broma. Por pasar el rato, hacer el tonto, o porque queremos divertirnos. Y como lo de meterse una cuchara de canela en la boca, ya está muy visto, es posible que intentemos algunas de estas bromas. Ojo, son crueles, así que no te extrañe si te llevas una paliza.

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Bromas graciosas que son de lo más crueles

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Detrás de las cortinas

Bromas graciosas que son de lo más crueles

Esta es una de las bromas clásicas. De pequeños, siendo niños, también la hemos hecho unas cuantas veces. Se trata de escondernos detrás de las cortinas, para así, asustar al que venga. Pero a veces, las cosas salen mal, porque la persona se asusta tanto, que se da contra la pared, y al final resulta que acaba más malherido de lo que pensábamos. 

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Aún así, es buena, y las primeras risas, serían absolutamente las mejores. Luego, ya, es preocupación lo que te invade, aunque yo me tomaría mi venganza. Solo por si acaso.

[nextpage title="Pasa el balón"]

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