Ana María Aldón revela si ha visto el mensaje de Kiko Jiménez y lanza una advertencia: «Es muy gordo… corto cabezas»

El entorno de José Ortega Cano se ha convertido en un polvorín después de que Kiko Jiménez lanzase hace unos días en el plató de ‘Sálvame’ la bomba. Según dejaba entrever el colaborador, poco después de que Ana María Aldón diese a luz a su hijo José María, hubo una reunión en la casa familiar en la que estuvieron presentes el torero, su hermana Mari Carmen Ortega Cano, la hija de ésta – de quien el de Jaén ha destacado que trabajaba en un laboratorio – y Gloria Camila, y en ella, presuntamente, se habría hablado de la paternidad del pequeño, que algunos miembros del clan pondrían en duda.

Kiko, además, mandaba un mensaje en directo a Ana María, contándole algo que sucedió en dicho cónclave y que, de saberlo, haría estallar a la andaluza. Un mensaje sobre el que la todavía mujer de Ortega Cano ha roto su silencio este domingo en el plató de ‘Ya es verano’, confesando que no lo ha leído porque «no me siento preparada. Tengo miedo de lo que me pueda encontrar». «Para seguir con la cabeza estable, he pensado que cuando vea al especialista esta semana, se lo comentaré y a ver si él me ve preparada. Yo no me veo» ha explicado.

Respecto a lo que «da a entender» el exnovio de Gloria Camila que pasó en dicha reunión, la gaditana cree que lo que está «dando a entender es algo muy gordo y muy grave» y, como admite, no sabe qué pensar: «Está relacionado con algo que a mí en su día me afectó muchísimo. No es que le dé credibilidad, pero no tiene necesidad de inventarse algo así«. «Si él estaba presente y no me dijo nada ¿significa que él participó de eso? Me lo podía haber dicho en su día. No había necesidad de hacerlo públicamente» ha señalado.

Indignada, ha confesado que «es un tema muy doloroso y a mí no me hace falta ver la cara de mi hijo fuera de mi tripa para saber quién es el padre. No me quiero creer que haya ocurrido, pero si eso ha ocurrido, corto cabezas». «Si eso se llevó a cabo, espero que se hayan quedado tranquilos», ha asegurado, en referencia a la familia de Ortega Cano. «No podría vivir en una casa donde se hiciera eso. Si descubro que alguien le ha puesto una mano encima a mi hijo para quitarle un cabello, o le ha metido un bastoncillo en la boca, tomaré todas las medidas» ha advertido.

Marcando distancia con el torero, Ana María le ha ‘echado en cara’ que no haya defendido «el honor de la mujer que tienes al lado» en su llamada al programa para negar la información de Kiko Jiménez y, con más fuerza que nunca después de «un verano crítico» ha revelado que «cada día me alegro más de haber tomado las riendas de mi vida y de haber aprendido a defenderme sola».

«Mi intención es que cada uno viva lo mejor posible; si es juntos, juntos y sino separados» ha asegurado, respondiendo con un sonoro zasca a la petición de Ortega Cano de que sea «transparente» a la hora de hablar de su crisis matrimonial: «Soy transparente hasta donde puedo. Soy igual de transparente que tú, pero voy hasta donde puedo llegar para no dañar a nadie».