Desalojados 60 ancianos tras producirse un fuego en los setos de su residencia de Lagartera

La Guardia Civil ha tenido que encargarse de casi 60 ancianos amenazados por un incendio que se originó en su residencia en la localidad de Lagartera. Al parecer las llamas fueron provocadas por unos setos quemados. Trabajadores del centro, agentes de la Guardia Civil y una veintena de personas que se encontraban disfrutando de una boda cerca de allí, evacuaron a los mayores a la calle para que no corrieran peligro.

Durante la madrugada de la noche del sábado al domingo, la Central Operativa de Servicios (COS) de la Guardia Civil de Toledo, que gestiona el teléfono de urgencias 062, recibió el aviso de un incendio próximo a una residencia de ancianos en la localidad de Lagartera. El fuego se originó en los setos que rodean el perímetro de la residencia, llegando a alcanzar las llamas hasta 4 metros.

Desde la Central se envió una patrulla de Seguridad Ciudadana de esta localidad y se activaron todos los servicios de extinción con la sala emergencias del 112 Castilla-La Mancha, ha informado la Guardia Civil en nota de prensa.

Al lugar del incendio llegó una patrulla del puesto de Oropesa, que observó la cercanía de las llamas a las ventanas de las habitaciones donde estaban alojados los ancianos y junto con los trabajadores de la residencia se apresuraron a evacuar a todos los ancianos que se encontraban en ese momento durmiendo.

Posteriormente los asistentes a un banquete de boda que se celebraba a escasos metros ayudaron a los agentes a poner a salvo a los ancianos, lejos de todo peligro, con mucha dificultad dada la movilidad reducida de alguno de ellos.

A la llegada de una dotación de bomberos de Belvís de la Jara y bomberos de Talavera de la Reina extinguieron por completo el incendio, pudiendo reubicar a todos las personas en el interior de sus habitaciones. También colaboraron con la extinción, protección civil de Lagartera y agentes medioambientales.

Patrulla de la Guardia Civil de Navalcán, permaneció próximo a donde se originó el incendio asegurando la zona, para que nadie no hubiesen más daños que lamentar. Los dos guardias civiles de Oropesa que actuaron en el desalojo tuvieron que ser asistidos por servicios médicos en el Hospital de Talavera de la Reina por inhalación de humo.

Tras su asistencia fueron dados de alta y se encuentran fuera de peligro, también fueron traslados al mismo hospital 3 personas que colaboraron en la evacuación, una trabajadora de la residencia y un anciano, todos en buen estado.