David Garrett en el Festival Roma Opera Aperta

El aclamado violinista David Garrett es considerado un pionero del crossover o fusión de estilos. Sus composiciones y arreglos musicales son capaces de borrar las barreras entre dos tipos de música tan opuestas como Mozart y Metallica. Prueba de ello son sus discos Free y Encore, de 2006 y 2008 respectivamente. Su último trabajo, “Alive” promete seguir sorprendiendo al público. Esta gira se podrá disfrutar en las Termas de Caracalla en Roma (escenario del Festival Roma Opera Aperta, organizado por el Teatro dell’Opera di Roma – programa estival) el próximo día 25 de julio. Las entradas ya están a la venta en operaticketsitaly.com.

Con más de 10 años de éxitos con su violín, Garrett ha obtenido 25 discos de oro y 17 de platino en países tan dispares como Hong Kong, México, Alemania, Brasil, Taiwán, o Singapur. Su violín se ha convertido en un instrumento capaz de sonar al más puro estilo del rock o el pop, al tiempo que interpreta piezas clásicas de todos los tiempos.

El secreto de su éxito

Si bien ha habido otras personas antes que él, sobre todo mujeres, que han utilizado el violín como instrumento de unión entre la música clásica y el pop o el rock, (Vanessa Mae, Lindsay Stirling, Sue San oTaylor Davis); el éxito de David Garrett tiene mucho que ver con haber entrado en el Libro Guinness de los Récords como el violinista más rápido de la historia. Su interpretación de la famosa pieza “El vuelo del moscardón” de Nikolài Rimski-Kórsakov en 2008 en un programa televisivo británico, supuso sin duda alguna su puerta directa a la fama. Ese año marcó un antes y un después para este músico, que además de violinista es también actor y modelo.

Su enorme discografía empieza en el año 1995 con interpretaciones de piezas clásicas, y llega hasta su último trabajo en 2020: Alive-My Soundtrack. También ha trabajado para el cine, siendo el protagonista de la película El violinista del diablo, de 2013, donde interpreta al famoso Paganini. Pero, volviendo a su trabajo más actual y que se podrá ver y vivir este mes en las Termas de Caracalla en Roma, este álbum ha recibido adjetivos de lo más variados como: poderoso, emocional, conmovedor, brillante, espectacular, irrepetible y un largo etcétera. El propio Garrett ha dicho: «Mi corazón late por todas las canciones de este álbum”.

Alive-My Soundtrack está compuesto por un total de 23 canciones. Se trata de un álbum donde David Garrett presenta sus favoritos personales partiendo de recuerdos y diferentes momentos de su vida. De todas las canciones que forman parte de este trabajo, hay algunas que según el propio músico tienen un significado especial. El primer ejemplo es “Dance Of The Knights”, como canto a su infancia. Sus recuerdos a cerca de los discos de su madre cuando tenía 4 o 5 años le hicieron escoger esta pieza de ballet que en su momento lo tenía fascinado. A partir de ahí, el violinista le imprime su sello y energía personal que tanto lo caracteriza.

En “Confutatis” de Mozart, su apuesta es totalmente visceral, ya que se trata de “una pieza que te atrapa de inmediato”, según sus propias palabras. De todas las composiciones de Mozart, esta ha sido la escogida para que tome vida a través de las cuerdas de su violín. La elección de “What A Wonderful World” de Louis Armstrong, no solo es porque se trata de un tema atemporal, sino también muy esperanzador y capaz de conmover a los corazones más cerrados. Una composición musical que está siempre de actualidad y que aporta luz y esperanza al mundo.

El tema “Shallow”, en cambio, es la interpretación de Garrett de un clásico moderno de la película “Ha nacido una estrella”. Un film que dejó huella en el violinista y que por eso decidió escoger esta pieza para incorporarla a su último trabajo. «Enter Sandman» de Metallica es, a su vez, un claro ejemplo de pura adrenalina en el escenario, donde el virtuosismo del músico se pone más de manifiesto que nunca. También hará las delicias del público más ecléctico y de los amantes del rock sin duda alguna.

Para “Come Together”, mítica y polémica canción de The Beatles, el músico escoge el violín eléctrico, pues es la mejor forma de presentar este tema y hacer que suenen todos los acordes de la mejor manera posible en el escenario.

Por último, hay que decir que David Garrett es un gran fan de Disney, por lo que La Bella y la Bestia aparecen en la selección de este álbum, así como “Let It Go” de Frozen, cuya selección obedece a la intención de producir un equilibrio de estados de ánimo tanto en él mismo como en los oyentes. Estos son solo algunos ejemplos de las canciones que componen el álbum y que se podrán escuchar durante la gira. Un trabajo de lo más variado y completo, perfecto para disfrutar de toda la magia del violinista más rápido del mundo.