Las colas en los aeropuertos y una promesa incumplida del Gobierno

Las colas de la vergüenza. Así las califica el medio MERCA2 en un artículo en el que ha dado eco a las múltiples cuestiones y quejas de aquellos que intentan coger un avión en los aeropuertos.

El motivo son las colas que siguen en los controles de pasaportes de los aeropuertos españoles, sobre todo en el Adolfo Suárez- Madrid-Baraja y Barcelona. Por parte del Gobierno, se sabe que van a reforzar las zonas con más policías, pero este compromiso aún no se ha visto satisfecho, mientras que la imagen de España sigue deteriorándose cada vez más.

Aglomeraciones, filas kilométricas, policía desbordada, falta de manos… son solo algunos ejemplos de lo que se puede encontrar en los aeropuertos. Y pese a las reclamaciones que se interponen, y que llegan al Ministerio del Interior en un intento porque aumenten la presencia policía, lo cierto es que siguen sin hacer nada que no sea «palabras».

La ‘promesa’ del Gobierno

Según recoge MERCA2, el Gobierno ha prometido más efectivos. Pero ahora, con la temporada de verano, la importancia no radica en esa promesa, sino en cumplirla antes de que el incremento de la llegada de turistas a España sature irremediablemente los aeropuertos.

Con esto, no solo aumentará el número de afectados, sino que también dañará la imagen del país, más teniendo en cuenta que los turistas extranjeros escogen mayoritariamente el avión para llegar.

Un problema no solo para los ciudadanos

A pesar de que son miles las personas que están viendo afectados sus vuelos, y en algunos casos hasta el punto de perder los de conexión, con un grave perjuicio a los ciudadanos, lo cierto es que también las líneas aéreas se están viendo dañadas.

Por un lado, puede suponer que el turismo caiga en picado debido a esa falta de refuerzo necesario por parte de policías que controlen los pasaportes (que, aunque el Gobierno ha anunciado que desplegará 500 policía nacionales, aún no se ha hecho operativo en ninguno de los 12 aeropuertos españoles con más tránsito -Madrid, Barcelona, Valencia, Málaga, Alicante, Tenerife Sur, Menorca, Palma, Ibiza, Lanzarote, Fuerteventura y Gran Canaria-.

Por otro, la incapacidad de las aerolíneas a satisfacer las demandas de sus clientes por culpa de los atrasos y las largas colas, lo que puede repercutir negativamente en la «salud» de los negocios.