La ansiedad y el estrés son fenómenos que, en sí mismos, no son necesariamente malos para la salud. En ocasiones puntuales y dentro de niveles controlados, ayudan a las personas a controlar situaciones adversas o de riesgo, pero en otros casos, sus síntomas pueden presentarse de forma recurrente y pronunciada, lo que sí provoca efectos perjudiciales a la salud.
Esta situación puede volverse especialmente adversa cuando los episodios leves se ven incrementados en frecuencia, intensidad o duración, lo que podría incluso dar lugar a un trastorno de ansiedad. Es por ello que el centro de terapia en línea especializado en la gestión emocional, autoestima y ansiedad, Heroicamente Psicología, divulga acerca de la importancia de conocer los principales síntomas de esta condición, con el objetivo de saber identificarla correctamente.
Factores que señalan un trastorno de ansiedad
Existe una diferencia entre un episodio y un trastorno de ansiedad. El primero suele presentar los mismos síntomas generales que el segundo, sin embargo, la diferencia radica en la frecuencia con la que aparecen los episodios. Si estos se dan con una frecuencia suficiente como para interferir negativamente en el día a día de la persona que los sufre, se trata de un trastorno de ansiedad. La clave es valorar hasta qué punto se ve limitada la capacidad de acción del individuo.
Entre los síntomas, se distinguen de tres tipos: físicos, cognitivos y conductuales. Los más conocidos son los físicos son la presión en el pecho, taquicardia, la dificultad para respirar, sudoración excesiva o escalofríos, tensión muscular, dolor abdominal e incluso vómitos o mareos. A nivel cognitivo, por otro lado, surgen pensamientos catastrofistas, incapacidad para concentrarse, anticipación, pensamientos rumiativos, pérdidas de memoria, o despersonalización (sensación de separarse de uno mismo). Por último, a nivel conductual, la conducta se ve afectada por aislamiento social, irritabilidad, aumento o falta de apetito, problemas del sueño, o consumo de sustancias.
Identificando el nivel de ansiedad
Heroicamente Psicología defiende que es natural sentir ansiedad en varias ocasiones, sin embargo, es importante saber distinguir entre una situación relativamente manejable y una que puede llegar a desbordar emocionalmente a la persona. Para ello, se pueden tomar como base tres criterios clave: la intensidad, duración y frecuencia de los síntomas. El análisis de este triángulo de factores permite establecer un panorama mucho más claro sobre la gravedad que implica el nivel de ansiedad que sufre cada persona, y así saber calmar la ansiedad ante diferentes situaciones.
Sin embargo, es importante recordar también que cada individuo es diferente y que la ansiedad puede presentarse de formas muy variadas, y quedarse durante tiempos indeterminados. La mejor forma de afrontar este trastorno y sus síntomas es desarrollar técnicas y habilidades para prevenirlo, para lo cual lo ideal sería acudir a un psicoterapeuta, ya sea en Heroicamente Psicología o en otro centro en el que estén especializados.
La terapia psicológica es un proceso terapéutico que ayuda a las personas a conocer la naturaleza de la ansiedad en sus propios casos y a desarrollar los mejores mecanismos para prevenir su presencia o gestionar emocionalmente sus efectos en caso de que se presente como un trastorno.
