Francisco Rivera se moja sobre la decisión de Isabel Pantoja de vender Cantora

Incondicional de la Semana Santa y sobre todo de su venerada Virgen de la Esperanza de Triana y del Cristo de las Tres Caídas, Francisco Rivera calienta motores para el Jueves Santo, cuando «si Dios quiere y el tiempo lo permite» – ya que la lluvia ha hecho aparición en buena parte de nuestro país – volverá a salir de costalero recorriendo las calles de Sevilla con su Hermandad de Triana.

Mientras, el torero disfruta de las tradiciones más arraigadas de los que confiesa son los días más especiales del año para él y, sin la compañía de Lourdes Montes y sus hijos – con quienes sí le vimos dando un tranquilo paseo por Sevilla el domingo de Ramos – ha acudido a ver a su Virgen acompañado por unos amigos.

«Estoy muy bien, disfrutando de la Semana Santa. Después de dos años imagínate» nos ha contado a su salida de la Iglesia de la Esperanza de Triana, tras atender amablemente a unos fans. Deseando que llegue la ‘Madrugá’ y volver a vestirse de costalero – «es importante para el alma» afirma – Francisco confiesa que la palabra ‘especiales’ se queda corta para estos momentos únicos: «Para mí es el día del año, la semana del año y para mí es lo más importante de mi vida y mi día a día esto«.

Confirmando que en Semana Santa es inevitable acordarse de los que ya no están a su lado – como sus padres, Paquirri y Carmen Ordóñez – el diestro bromea cuando le preguntamos si también tiene en mente a sus hermanos Cayetano y Kiko: «Y los coleguiquis también«.

Y hablando de Kiko, imposible no preguntar a Fran por la decisión de Isabel Pantoja de abandonar Cantora para siempre y deshacerse de la propiedad más querida para su padre. Un asunto sobre el que el padre de Tana Rivera, gesticulando, ha dejado claro que no tiene nada que decir porque, como revela, lo único importante en estos momentos es «que el tiempo respete, que las hermandades puedan salir, que podamos disfrutar de esto los hermanos de sus imágenes. El resto es que no me interesa nada«.