El PP fuerza una votación la próxima semana en el Congreso para la rebaja de impuestos a los combustibles

El PP forzará una votación la próxima semana en el Pleno del Congreso de los Diputados para exigir la rebaja de los impuestos aplicados a los carburantes y al gas, con la reducción al mínimo legal comunitario del Impuesto Especial a los Hidrocarburos y al 4% súperreducido del IVA al suministro de gas y calefacción.

En plena crisis por el paro sectorial convocado en el sector de transporte por carreteras, según el orden del día del próximo Pleno, los ‘populares’ han elegido defender una proposición no de ley en la que abogan por una rebaja de la fiscalidad ante una situación que consideran de «auténtica emergencia energética».

Además de las medidas mencionadas, el PP también pide liderar a nivel europeo la normativa sobre el IVA para aplicar temporalmente un tipo impositivo reducido a los carburantes de automoción y suspender los tipos mínimos del Impuesto Especial sobre Hidrocarburos en tanto persista la crisis.

REDUCIR LAS APORTACIONES AL FONDO DE SOSTENIBILIDAD

En su iniciativa, registrada la semana pasada en el Congreso, el PP recuerda que el Gobierno tiene en marcha una reforma que supondría un recargo en los precios del carburante y el gas natural, el Fondo Nacional de Sostenibilidad del Sistema Eléctrico.

En este sentido, exige reducir la contribución de los carburantes a este fondo, pensado para sacar de la factura de la luz las llamadas primas a las renovables y financiar su coste a través de otros suministros energéticos a desincentivar.

RENUNCIAR A LA RECOMENDACIÓN DE LOS EXPERTOS

Por otro lado, los ‘populares’ quieren que el Gobierno renuncie a aplicar un aumento generalizado de los impuestos aplicados sobre los hidrocarburos, tal y como contempla el reciente informe de expertos para la reforma fiscal.

Una recomendación que el PP ve «totalmente desconectada de la realidad», al proponer subidas impositivas de hasta un 294% de la recaudación sobre gas natural y 47% de la automoción que, esgrime, «supondría la quiebra definitiva de buena parte de nuestra industria, pero también de familias, pymes y autónomos».