Podemos marca su papel en la reforma fiscal y pide hablar de contenido y no de tiempos

El portavoz de Unidas Podemos en el Congreso, Pablo Echenique, ha afirmado que la reforma fiscal no supone una brecha en el Gobierno de coalición y ha dejado claro que su contenido debe ser pactado entre los socios de gobierno, como ocurrió con la reforma laboral cuya iniciativa fue del Ministerio de Trabajo pero se negoció con el PSOE.

Después de que la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, tildara de «inoportuna» la batería de medidas de Unidas Podemos, Echenique ha dicho que lo relevante es el «contenido» y no «los tiempos».

Y en línea con la postura de la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, ha admitido que que la «voz» principal en la materia debe ser Hacienda, al igual que Trabajo lo hizo en material laboral. No obstante, ha reafirmado que los asuntos importantes se pactan entre los dos partidos del Ejecutivo.

En declaraciones a TVE, ha subrayado que es «habitual» que las organizaciones políticas que integran el Gobierno de coalición realicen propuestas en diferentes materias, dentro de un proyecto «integral» de país en el que es clave la reforma fiscal.

Y como ejemplo, ha aludido a que el PSOE recientemente presentó una iniciativa parlamentaria en el Congreso para que el Defensor del Pueblo emprendiera una investigación sobre los abusos menores en la Iglesia, cuando la competencia de la protección de este colectivo es de la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra.

HAY UN «PROBLEMA GRAVÍSIMO» EN MATERIA FISCAL

De esta forma, ha destacado que el espacio confederal «no ha hecho ningún drama ni escándalo» sino al revés, celebrando la propuesta y mostrando disposición a negociar una postura común.

Preguntado sobre si era el momento adecuado para presentar su batería de medidas para la reforma fiscal cuando el comité de expertos aún no ha emitido sus conclusiones, Echenique ha subrayado que «hablar de informes» y de «tiempos» a veces quita relevancia sobre el «fondo», que España tiene un sistema fiscal «injusto» donde pymes y trabajadores pagan proporcionalmente el doble de impuesto que las grandes empresas.

Y es que el portavoz parlamentario del grupo confederal ha tildado de «gravísimo» que el país tenga siete puntos menos de recaudación fiscal que la media de la Unión Europea (UE), porque deteriora el sistema público. En consecuencia, ha insistido en que esto «no va de tiempos ni de informes», sino de abordar un problema que requiere, a su juicio, que las grandes fortunas y corporaciones aporten más a las arcas públicas.