En la provincia de Tarragona puedes pasar unos días increíbles de vacaciones, encontrarás playas en las que disfrutar de las aguas del Mediterráneo, pero también enclaves de montaña increíbles. Podrás hacer rutas a pie o en bicicleta, visitar los restos romanos o recorrer las preciosas villas medievales. La naturaleza, el arte y la historia se dan la mano para crear un entorno ideal. Hoy queremos hablarte del que se considera el pueblo medieval más bonito de la provincia catalana y de algunos más.[nextpage]
Montblanc considerado el pueblo más bonito de Tarragona
El pueblo de Montblanc es la capital de La Conca de Barberà, en el interior de la Costa Daurada. Se considera también el corazón de la Ruta del Císter, es decir, del gótico cisterciense. Este pueblo conserva su arquitectura medieval originaria en las calles de piedra, pero también en las diferentes iglesias, la plaza mayor o la oficina de turismo que podréis localizar dentro de la iglesia de Sant Francesc. Podemos decir que la mayor parte del casco antiguo es un monumento en sí mismo.
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Qué ver y qué hacer en Montblanc
Pasear por las calles de este pueblo de Tarragona es como hacer un viaje en el tiempo. El municipio al completo fue declarado Conjunto Monumental y Artístico en 1947. En lo alto del pueblo se encuentra la iglesia de Santa María de Montblanc que es del s. XIV. Del mismo siglo es el recinto amurallado del que se conservan torres y portales. Es interesante conocer el pueblo en la Semana Medieval, que propone también rutas para conocer el patrimonio natural de los alrededores. También encontraréis el colectivo Llop Aventura que gestiona todo lo que tiene que ver con los deportes y aventuras por la zona. A finales de septiembre se celebra un festival internacional de cerámica que recibe el nombre de Terrània. Y los aficionados a los Playmóbil en octubre pueden acudir a Clickània, el festival internacional de Clicks de Playmobil.
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L’Ametlla de Mar otro hermoso pueblo de Tarragona
Enmarcado en la comarca del Baix Ebre sus habitantes conocen este pueblo como La Cala, y se definen a sí mismos como caleros, el motivo son las 27 calas y playas que se encuentran en el municipio. Es un entorno donde los turistas pueden disfrutar de las playas, principalmente de las de L’Alguer y Pixavaques populares por estar ubicadas en el mismo centro del pueblo. También lo es la de San Jordi que se encuentra en la Urbanización de la Marina San Jordi a los pies de un castillo del s. XVIII. En el paseo que rodea el puerto encontrarás a los pequeños pescadores de la zona y encontrarás bares y restaurantes donde probar la comida típica.
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Horta de Sant Joan un pueblo que marcó a Picasso
Si viajas a la comarca de Terra Alta en Tarragona, no puedes dejar de visitar el pueblo Horta de Sant Joan. Fue declarado Bien Cultural de Interés Nacional por su Conjunto Histórico Artístico. Está ubicado en lo alto de una colina con un manantial natural muy cercano a la cima lo que hace que haya sido poblado desde la época de los íberos. Cuenta con calles estrechas y empinadas. Debes visitar entre otras cosas la iglesia románica-gótica (siglo XII), la antigua prisión de Horta. Y especialmente El Parot que es un olivo declarado árbol monumental por su antigüedad bimilenaria. También el Centre Picasso, ya que el artista se refugió durante una temporada en este pueblo medieval al que siempre guardó cariño.
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La Vilella Baixa en el Priorat de Tarragona
Este pueblo está ubicado al abrigo de la Sierra de Montsant en el punto de confluencia del río Montsant y el riachuelo de Escaladei. Sobre el río se sitúa uno de los puntos de visita recomendada, el Puente de Piedra. Otro es la llamada “Calle que no pasa” que es la más antigua del pueblo, de origen medieval, a ella se accede desde una portalada y termina en una plaza, motivo por el que se utilizó como espacio de defensa durante las Guerras Carlistas. Se pueden contratar visitas para conocer los molinos y bodegas del pueblo. Por los alrededores hay rutas muy interesantes para hacer bien a pie o bien en bicicleta.
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Miravet en la comarca de la Ribera del Ebro
El pueblo fue dominado por los musulmanes y recuperado por la orden del Temple al que se cedió su gestión. Eso explica que sobre la colina se ubique un castillo templario y que justo debajo se localice el barrio antiguo anclado en la roca. Se organizan rutas a través del entorno natural que lo rodea, siguiendo al río Ebro. Solo tiene unos 815 habitantes, muchos de los cuales siguen la tradición alfarera, los localizareis en el Raval dels Canterers.
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Siurana otro de los pueblos medievales más bonitos de Tarragona
Se ubica en la comarca del Priorat y más que de Tarragona se considera uno de los pueblos medievales más hermosos de España, con uno de los mejores miradores. Cuenta con un castillo de origen árabe que se eleva a 730 metros sobre el nivel del mar desde el que se ven unos acantilados que encantan a los escaladores. Siurana ha sido descrito en más de una ocasión como un pueblo de cuento.
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Tivissa un pueblo de Tarragona que conserva su carácter medieval
Las calles del pueblo de Tivissa son estrechas y sinuosas y aún conserva su muralla con lo que los turistas pueden hacer un buen recorrido por su historia. En la Plaza de la Baranova al lado de la Iglesia se abre el mirador desde el que se pueden ver las las montañas de Prades, la sierra del Montsant, Pàndols y Cavalls, els Ports y la sierra de Cardó.Los lavaderos antiguos y las casas señoriales son otros de los atractivos.
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Pratdip en la comarca del Baix Camp
El nombre de este pueblo se debe a una curiosa leyenda que habla de los dips, una especie de perros que salían por las noches a alimentarse de la sangre del ganado. El pueblo conserva su naturaleza medieval destacando los lavaderos públicos hoy situados a la entrada del pueblo. Y también las dos torres de defensa.
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Prades otro de los pueblos medievales de Tarragona
Prades fue uno de los condados principales de la Corona de Aragón, lo que explica que esté rodeado de murallas. Una visita especial merece la ermita de l’Abellera, que está incrustada bajo una cueva de rocas de la montaña. Tiene una plaza porticada en la que se reúne la mayor parte del patrimonio artístico. En ella se encuentra una fuente típica del Renacimiento Catalán, de cuyos caños cada mes de julio durante una noche mana cava en lugar de agua.[/nextpage]
