El PP ve en la comisión de la Kitchen «un juicio sumarísimo e inquisitorial» en su contra

El PP considera que la comisión que ha investigado en el Congreso el espionaje al ex tesorero del PP Luis Bárcenas se ha convertido en «un juicio sumarísmo e inquisitorial» en contra del primer partido de la oposición y ha denunciado la instrumentalización «partidista» que se ha hecho de este órgano desde que comenzó sus trabajos hace un año hasta convertirse, dice en «una causa general» contra los ‘populares’.

Así lo plasma en las conclusiones que el partido de Pablo Casado ha presentado al término de la citada comisión de investigación, que se analizarán junto a las del resto de grupos en la reunión prevista para este miércoles.

En el escrito, que consta de 39 páginas, el PP señala que las únicas conclusiones a las que han podido llegar apuntan a una utilización «política» de la citada comisión de investigación, al «maniqueísmo» de pretender crear una policía «buena» y otra «mala», y a la voluntad de dar sólo presunción de veracidad a la versión del excomisario José Manuel Villarejo sólo cuando perjudican al primer partido de la oposición.

ARRANCÓ CON LA CAMPAÑA ELECTORAL CATALANA

En concreto, el PP denuncia el uso «partidista» de la comisión recordando que el PSOE y Unidas Podemos solicitaron su creación más de un año después de que el Juzgado de Instrucción número 31 de Madrid absolviera a las personas investigadas y de que la Audiencia Nacional así lo confirmara ratificando la inocencia de las mismas, y justo cuando el entonces presidente en funciones en Cataluña, Pere Aragonés, convocó elecciones «tras la inhabilitación de Quim Torrra y la imposibilidad de encontrar un candidato que lograse la mayoría suficiente para ser investido presidente».

Y añade que la intencionalidad política de la comisión queda en evidencia en el enunciado de la misma puesto que «da por probado» una utilización ilegal de los efectivos, medios y recursos del Ministerio del Interior para favorecer al PP». «Nacía así viciada de origen», resume el PP, quien critica que el único objeto de esta comisión haya sido «ajustar» las declaraciones de los comparecientes «al relato preconcebido» del PSOE y Unidas Podemos.

El PP también denuncia el «menoscabo» de derechos fundamentales al discurrir los trabajos de la comisión de investigación en paralelo a la instrucción de un procedimiento penal en el que tanto el PSOE como Unidas Podemos tenían acceso al expediente judicial al ejercer la acusación popular en el proceso, al tiempo que critica la superación de los límites que el ordenamiento jurídico impone a las comisiones de investigación.

«IRA IRRACIONAL» CONTRA LA POLICÍA

También concluye que la comisión ha servido para «atacar» a la Policía, contra los que el PSOE y Unidas Podemos, a juicio del PP, han descargado toda su «ira irracional» con todo tipo «insidias» y «faltas de respeto». Aún con todo, recalca que, «con la única excepción de Villarejo», ninguno de los policías que han desfilado por el Congreso han afirmado haber tenido conocimiento de la existencia de la denominada ‘operación Kitchen’ y haber visto cantidades asignadas a la misma.

«Queremos poner de manifiesto que los trabajos de la comisión no han servido para encontrar la supuesta información que poseía el señor Bárcenas contraria a los intereses del PP, y por la que supuestamente se montó un operativo policial en el Ministerio del Interior», afirma a renglón seguido el PP.

Los de Casado denuncian, por último, que tanto el PSOE cono Unidas Podemos den por buenas las acusaciones vertidas por Villarejo en la comisión de investigación sólo «cuando les conviene», esto es, sólo cuando sirven para deslegitimar al PP: «El Grupo Popular no da ni quita presunción de veracidad a muchos de las acusaciones vertidas por el señor Villarejo, pero no compartimos la hipocresía del PSOE y Unidas Podemos, empeñados en afirmar la veracidad absoluta de aquello que les conviene y en negar todo lo que se desvía de su relato oficial».