Acostarse entre las 22 y las 23 horas puede reducir los riesgos de sufrir problemas cardiovasculares

Todos sabemos que para disfrutar de un descanso de calidad debemos dormir entre 7 y 9 horas, pero, ¿cuál es la hora ideal para irnos a dormir? Esta pregunta es más complicada de resolver, principalmente porque no todos nos despertamos a la misma hora.

Pero, según este nuevo estudio de la European Society of Cardiology, entre las 10 y las 11 de la noche es la mejor hora para irnos a dormir. Y no solo eso, sino que este estudio, en el que se han utilizado datos del Biobank del Reino Unido y han participado más de 88.000 personas, acostarse entre las 22 y las 23 horas también reduce el riesgo de sufrir problemas cardiovasculares, y que la hora de irse a dormir afecta más a las mujeres que a los hombres.

Por otro lado, el estudio revela que las personas que se van a dormir entre las 11 y las 12 de la noche tienen un 12% más de riesgo de sufrir enfermedades cardíacas. Un porcentaje que aumenta hasta el 25% para aquellas personas que se acuestan pasadas las 12 de la noche, y se sitúa en un 24% para personas que se acuestan antes de las 22 horas.

La explicación está en que el cuerpo tiene un reloj interno de 24 horas conocido como ritmo circadiano que es el encargado de regular tanto las actividades físicas como mentales. Dicho esto, el estudio asegura que irse a dormir más pronto de las 22 o más tarde de las 23 horas altera el ritmo circadiano, lo que desemboca en consecuencias negativas para la salud cardíaca.

La conclusión que se puede sacar de este estudio es que las 10 y media de la noche es la mejora hora para irse a dormir, tanto para disfrutar de un descanso de calidad como para mejorar la salud cardiovascular.

La importancia de una buena higiene del sueño

Aprovechando este estudio, queremos hacer hincapié en la importancia que tiene la higiene del sueño para dormir bien y disfrutar de un descanso de calidad, que consiste en una serie de hábitos o técnicas que ayudan a dormir mejor, y sirven para prevenir aquellos factores que influyen de un modo negativo mientras dormimos.

El principal objetivo de estas técnicas es conseguir que te acuestes y despiertes todos los días a la misma hora, algo clave para aumentar la calidad del sueño y para ayudar a conciliarlo.

¿Padeces problemas para dormir? Si es así, en el blog de Sofareva encontrarás buenas prácticas para dormir mejor que te serán de gran ayuda tanto para conciliar el sueño, como para mantenerlo a lo largo de toda la noche y despertarte descansado. Y, a continuación te vamos a mostrar algunas de las más destacadas.

Tips para una buena higiene del sueño

Renueva tu colchón

Sin duda, el colchón es lo más importante para disfrutar de un descanso de calidad, siendo clave para proporcionarnos la comodidad que necesitamos. De hecho, tal y como asegura la Asociación Española de la Cama (ASOCAMA), los colchones tienen una vida útil de 10 años, y a partir de ese momento, es altamente recomendable cambiarlos, ya que se entiende que a partir de ese momento dejan de cumplir con su función.

Acuéstate y despiértate todos los días a la misma hora

Uno de los puntos más importantes es acostarte y despertarte todos los días a la misma hora para así respetar los horarios de sueño. Al principio te resultará complicado, pero poco a poco tu cuerpo se irá acostumbrando, hasta que te resulte más fácil conciliar el sueño y mantenerlo.

La cama solo para dormir

Para no malacostumbrar a tu cuerpo, ve a la cama solo cuando vayas a dormir, y evita estar tumbado sobre el colchón para ver la tele, leer un libro, utilizar el móvil, etc. De esta forma, poco a poco asociará que irse a la cama es síntoma de dormir.

Reduce la siesta

Es cierto que descansar un poco después de comer puede ser beneficioso, pero, debes tratar de reducir el tiempo de la siesta, para evitar que tu cuerpo llegue descansado a la hora de dormir. Según los expertos, lo ideal son siestas de 15-20 minutos, y a partir de los 30 minutos está demostrado que interfieren negativamente en el sueño.

Haz ejercicio

Por otro lado, hacer ejercicio físico te ayudará a dormir y descansar mejor, ya que tu cuerpo llegará a la noche más cansado y con ganas de dormir. Eso sí, es importante que no realices ejercicio a última hora del día, ya que en ese caso el efecto podría ser todo lo contrario.

Cuida la alimentación

Por último, también es importante que cuides la alimentación y sigas una dieta saludable, que te permita disfrutar de un buen estado de salud y evite que padezcas problemas estomacales o de hinchazón durante la noche, lo que dificultaría la conciliación del sueño. Siempre es importante, pero especialmente, debes cenar ligero y evitar las cenas copiosas y abundantes, así como tratar de cenar como mínimo dos horas antes de acostarte, para así asegurarte de haber hecho la digestión en el momento de irte a la cama.