La Comunidad de Madrid ha censurado que el plan del Ministerio de Sanidad para la Atención Primaria adolece de medidas concretas y ha reclamado una serie de cambios normativos y una financiación específica por parte del Gobierno central para este primer nivel asistencial.
El consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, ha trasladado este planteamiento durante el ‘I Encuentro Atención Primaria: Retos y Oportunidades’ que ha tenido lugar en Maspalomas (Gran Canaria) y en la que Ministerio y Comunidades Autónomas han firmado una declaración para la aprobación de un Plan de Acción, antes de que finalice el año 2021, para reforzar la Atención Primaria en toda España.
En concreto, se trata de un Plan de Acción orientado a un abordaje integral de los problemas de salud más frecuentes; la práctica clínica centrada en la persona y la comunidad, considerando los determinantes sociales de la salud; la mejora de la capacidad de resolución diagnóstica; el fortalecimiento de la longitudinalidad de la atención; el crecimiento profesional; el impulso de los sistemas de información y la digitalización; el fomento de la innovación y de la investigación; y la adaptación y formación de los Recursos Humanos, garantizando la efectividad, la sostenibilidad y la calidad de la Atención Primaria.
Un documento base promovido por el departamento de Carolina Darias que en opinión de la Comunidad de Madrid adolece de medidas concretas que se tienen que abordar desde ya en el ámbito normativo y regulatorio nacional para afrontar sobre todo la escasez de médicos que sufre la Atención Primaria en todo el Sistema Nacional de Salud, según han indicado fuentes regionales.
Por ello, durante el encuentro el Ejecutivo madrileño ha propuesto de manera muy concreta la aplicación de medidas como la necesidad de partidas específicas que deberá aportar el Gobierno central para financiar la Atención Primaria.
Igualmente, ha planteado cuestiones sobre el desarrollo de nuevas especialidades como la creación de la especialidad de Urgencias para evitar el trasvase de los residentes tras la finalización de su formación o el desarrollo de la especialidad de enfermera familiar y comunitaria (EFC) y de la enfermera de pediátrica en este primer nivel asistencias.
Sobre este punto, ha defendido la necesidad de definir los puestos de trabajo en AP para dichas especialidades, crear bolsas de trabajo específicas para enfermeros especialistas y resolver el reconocimiento de EFC por la vía excepcional de acceso.
FACILITAR LA DESBUROCRATIZACIÓN
En esta misma línea, el Gobierno madrileño ha reclamado otra serie de medidas encaminadas a facilitar la desburocratización como que el Instituto Nacional de la Seguridad Social flexibilice aquello que facilite al médico cursar la Incapacidad Temporal o suprimir en la normativa la obligatoriedad de que sea el médico el que firme todo tipo de informes de salud si hay profesionales de otras categorías cualificados para hacerlo como por ejemplo enfermeras, en relación con la situación de dependencia.
En el encuentro, el consejero madrileño del ramo también se ha mostrado favorable a otras medidas como aumentar el número de plazas de médicos de Familia en la convocatoria de plazas MIR u otra serie de cuestiones relacionadas con la homologación de profesionales sanitarios extracomunitarios, recalcando la necesidad de agilizar estos procesos y reconocer los títulos de especialistas.
Sobre este último punto, la Comunidad ha puesto sobre la mesa la conveniencia de modificar el decreto regula las condiciones para reconocer títulos extranjeros de especialista en Ciencias de la Salud obtenidos en estados no miembros de la Unión Europea.
PROPUESTA DEL MINISTERIO
En el documento acordado por el Ministerio y las Comunidades Autónomas también se recoge «adecuar» un presupuesto y desarrollo normativo para conseguir los objetivos del plan, así como trabajar en el Pleno de la Comisión de Recursos Humanos del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS) en la actualización y adaptación de la Formación Sanitaria Especializada de la Atención Primaria.
La declaración reivindica que la Atención Primaria «continúa siendo una de las señas de identidad del Sistema Nacional de Salud, actuando como un pilar fundamental para lograr el derecho a la protección de la salud de la población, para garantizar una atención cercana, equitativa y cohesionada en todo el territorio nacional». «Nuestra Atención Primaria, además de tener la confianza de toda la ciudadanía, ha acreditado, según informes internacionales, ser una de las mejores del mundo», agrega al respecto.
En cualquier caso, se admite que la pandemia de Covid-19 «ha supuesto un obstáculo importante para implantar las acciones y lograr, en buena medida, los objetivos previstos en el Marco Estratégico y los diferentes planes de las CCAA». Por ello, «coinciden en la necesidad de revisar el actual modelo de Atención Primaria teniendo en cuenta la experiencia acumulada en las dos últimas décadas y, singularmente, la vivida durante la pandemia».
