PSE y PSC apuestan por el diálogo en Euskadi y Cataluña para impulsar «proyectos inclusivos»

La secretaria general del PSE-EE y vicelehendakari, Idoia Mendia, han compartido este lunes su apuesta por el diálogo en Euskadi y Cataluña para impulsar «proyectos inclusivos» dentro del «espacio compartido de España». Además, Illa ja insistido en que es viable el «fortalecimiento del autogobierno», pero no la autodeterminación ni la ley de amnistía.

Mendia ha ofrecido este lunes una rueda de prensa en Bilbao con el presidente del Grupo Socialista en el Parlament de Catalunya, Salvador Illa, quien, según la líder de los socialistas vascos «ha cambiado el paso de Cataluña» tras ganar unas elecciones «con el mensaje que necesitaban los catalanes, el de la moderación, el diálogo, el acuerdo y la legalidad», aunque «los independentistas catalanes se aliaron de nuevo para el Gobierno» y le impidieron liderarlo «más por necesidades propias que por las de la sociedad».

Tras recordar que Illa fue «el ganador en las elecciones, el que más respaldo tuvo de los ciudadanos y el que se ha abierto camino definitivamente», ha señalado que el presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, «lo ha sabido leer perfectamente». «Una vez más, el socialismo ha sabido entender lo que pasa en el país, y lo que pasa en Cataluña, y por eso ha dado un paso valiente y, tras una década de bucle y parálisis, hoy se camina hacia una solución política para un problema político como el que hay en Cataluña», ha remarcado.

Idoia Mendia ha dicho que «hay un problema dentro de Cataluña, entre los propios catalanes, los que son independentistas y los que no» y también hay «un problema político en algunas comunidades, como Cataluña, de encaje en el proyecto común de España». «Esto es lo que hay que abordar, el de dentro y el que mira al resto de España», ha subrayado.

En ese sentido, ha apuntado que este camino «ya lo hemos recorrido en Euskadi antes y sabemos lo que es una década de desafío permanente, de división continua, de tensionamiento insoportable en una sociedad, agravado además por el acoso terrorista». «Pasó en Euskadi, y pasa ahora en Cataluña. Aquí conseguimos abrir paso al entendimiento entre diferentes. No fue fácil. Y hubo que tomar decisiones arriesgadas», ha recordado, para destacar que los socialistas se atrevieron a «tomar las riendas de Euskadi y pusimos a ese Gobierno a trabajar para todos los vascos». «Se nos pusieron todos los palos en las ruedas, pero lo hicimos. Y, además, acabamos con ETA. Desde entonces disfrutamos de paz y estabilidad», ha manifestado.

Mendia ha dicho que la política en Euskadi «se ha serenado» y se ha centrado en «la agenda social y económica», lo que ha permitido «resistir mejor el embate de esta crisis y nos sitúa en una sólida posición para una recuperación justa». Por eso, ha subrayado, los socialistas vascos se han implicado en «la recuperación social y económica de Euskadi desde el Gobierno Vasco».

Tras advertir de la necesidad de «certezas en tiempos de incertidumbres», ha defendido que «no hay mayor certeza que saber que en una sociedad plural los diferentes nos entendemos por el bien común, el de todos, el de quienes nos votan y quienes no lo hacen».

En ese sentido, ha considerado que «el diálogo y la colaboración entre instituciones es fundamental para avanzar en esa confianza y certidumbre» y ha dicho mirar a Cataluña «con el deseo de que allí sepan encontrar la vía de éxito que los vascos hemos sabido explorar, la suya, con su fórmula, con la que se acuerde para convivir entre los distintos y progresar juntos» y que «ese entendimiento encuentre el cauce legal para hacerse realidad».

«Lo que sí tengo es la convicción de que esa solución, como en Euskadi, pasa por el socialismo, porque seguimos siendo el único partido que tiene una idea clara de lo que es España: un espacio común compartido en el que cabemos todos, y porque sabemos que las soluciones pasan por el diálogo, la negociación y el pacto», ha afirmado.

RETOS

La líder del PSE-EE ha señalado también que tenemos «un inmenso reto por delante, el de una transformación acelerada de todo lo que conocemos» y, en ese sentido, ha destacado que contamos con «el respaldo expreso de Europa, que ha avalado el proyecto transformador diseñado por el Gobierno de Pedro Sánchez».

Tras afirmar que no se puede «esperar nada en el corto plazo de una oposición desbocada en el Congreso de los Diputados», ha insistido en que contamos con «la fiabilidad de un Partido Socialista sólido, dispuesto de nuevo a afrontar de cara todos los desafíos que tenemos por delante». «Contamos también con Cataluña», ha dicho , para mostrarse segura de que «el camino que traza el socialismo catalán de sensatez, entendimiento y serenidad se va a abrir paso, como conseguimos hacerlo los socialistas vascos en Euskadi».

EXPERIENCIA DE LOS SOCIALISTAS VASCOS

Por su parte, Salvador Illa ha apostado por aprender de los socialistas vascos «su experiencia de diálogo y acuerdo, y de su trayectoria tenaz en defensa del diálogo del acuerdo que ha permitido hace ya algunos años un tiempo nuevo que permite a los vascos centrar todas sus energías en lo que importa hoy a los ciudadanos vascos, catalanes y españoles, la lucha contra la pandemia, que está pasando otra vez por un momento que exige máxima prudencia de todos, en la recuperación de nuestra economía y en la transformación de los sistemas productivos».

Illa ha afirmado que el diálogo y el acuerdo son «imprescindibles» también en Cataluña y ha afirmado que socialistas vascos y catalanes quieren seguir formando parte de un espacio público compartido que es España». «Y para hacerlo con proyectos inclusivos que no dejen a nadie atrás la vía es la del diálogo y del acuerdo».

Tras afirmar que en Cataluña, tras las elecciones se está consolidando «un nuevo tiempo político con decisiones inteligentes y valiente del Gobierno de España», ha precisado que las dos «reglas» para este nuevo tiempo político son «decir la verdad y plantear alternativas realistas y viables para el futuro de Cataluña» y «trabajar para unir a la sociedad catalana con proyectos que se dirijan al conjunto de la sociedad catalana».

En ese sentido, ha advertido que «no es viable un referendum de autodeterminación ni una ley de amnistía» y tampoco es «un punto de consenso la independencia, ni el mantenimiento del estatus quo», mientras que «sí lo es un fortalecimiento del autogobierno».

Por otro lado, ha apostado por el método del diálogo para «abrir negociaciones que acaben en pactos» y ha señalado que «la línea roja» es «el respeto al estado de derecho y al marco de convivencia que nos dimos en su momento delimitado por la Constitución y el Estatuto de Autonomía, que se puede cambiar, pero siguiendo sus propios procedimientos».