Ciudadanos pide al Gobierno una estrategia de promoción mundial del español

Ciudadanos quiere que el Gobierno elabore una estrategia de promoción del español en el mundo con la que impulsar la acción exterior y la presencia de España en otros países, además de combatir el revisionismo histórico que se está produciendo en países como Estados Unidos y Filipinas.

En una proposición no de ley presentada en el Congreso de los Diputados como motivo del Día Mundial del Español, los de Inés Arrimadas piden al Gobierno que presente en las comisiones de Asuntos Exteriores y de Cultura de la cámara, «en un plazo máximo de seis meses, una estrategia de promoción global del español como herramienta de acción exterior y presencia de España en el mundo».

Igualmente, Cs quiere que se detallen las acciones que se llevarán a cabo en el seno de dicha estrategia así como en las relaciones bilaterales con aquellos países con los que hay «lazos históricos, sociales y culturales para evitar la expansión de una nueva leyenda negra sobre España y fomentar el conocimiento objetivo de los hechos en su contexto histórico».

En su exposición de motivos, los ‘naranjas’ lamentan que pese a que Estados Unidos es el país con más estudiantes de español en el mundo y a la «gran presencia de lo hispano», en 2020 se vivieron «unos episodios lamentables» de rechazo al legado español «auspiciado además por la persecución que el expresidente Donald Trump instigó contra los hablantes de español» en el país.

«Como resultado, se vandalizaron estatuas de personalidades españolas o hispanas de relevancia que jugaron un papel fundamental en la historia de Estados Unidos, como Fray Junípero Serra o Miguel de Cervantes», recuerdan.

REVISIONISMO HISTÓRICO PUERIL

Además, añade Cs en su iniciativa parlamentaria, «varios estados y ciudades estadounidenses han iniciado procesos para retirar símbolos relacionados con España o con el legado hispánico en el país de sus símbolos oficiales, siempre basados en un revisionismo histórico pueril y no ajustado a los hechos históricos, su complejidad y su marco temporal».

Como resultado de todo ello, en el país «se ha creado un caldo de cultivo con intereses espurios para acorralar al español y a sus hablantes por su notable crecimiento, basándose en una nueva leyenda negra contra el legado hispánico en las Américas», denuncia Ciudadanos.

Igualmente, añade, también «han calado hondo» este tipo de discursos en Filipinas, donde entre otras cosas su presidente, Rodrigo Duterte, ha señalado «a los lazos históricos, culturales y sociales» relacionados con el «legado hispánico como causa de los problemas del país».

En concreto, citan el anuncio de Duterte de que pretende cambiar el nombre de Filipinas para «desligarlo del pasado de brutalidad colonial de Felipe II» y lo atribuyen al «revisionismo histórico y la adhesión a una nueva leyenda negra como elemento de distracción para evitar la rendición de cuentas por su gestión al frente del Gobierno filipino».

Por otra parte, Cs pide al Gobierno que se dote «al Instituto Cervantes y a las universidades españolas de las herramientas y recursos necesarios para poder emprender acciones de colaboración con sus homólogos en otros países de mayoría hispanohablante para fomentar el aprendizaje y conocimiento del español en terceros países, especialmente en América del Norte y Asia-Pacífico».