El FMI ve cierto margen en la UE para implementar medidas adicionales «bien dirigidas»

La Unión Europea (UE) cuenta con cierto espacio fiscal para implementar medidas adicionales en respuesta al impacto de la crisis de la Covid-19, aunque lo fundamental será la puesta en marcha de medidas bien dirigidas a impulsar la competitividad de la economía del Viejo Continente, según ha señalado la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva.

«No todos los países, pero algunos países de la UE cuentan con espacio fiscal para medidas adicionales bien dirigidas», ha señalado la economista búlgara en un acto compartido con el comisario europeo de Economía, Paolo Gentiloni, donde ha defendido el papel de los estabilizadores automáticos en Europa en la comparativa con el aparente mayor volumen de ayudas desplegado por Estados Unidos.

No obstante, ante la proximidad del plazo límite para que los países de la UE presenten sus planes para acceder a los recursos del fondo europeo de recuperación, la directora del FMI ha recordado que la institución internacional apuesta por un empuje a la transición climática y a la creación de empleo, subrayando que los planes de los países no deberían limitarse a medidas de financiación, sino también incluir reformas.

«Estados Unidos y la UE han actuado con una rapidez y decisión sin la cual la recesión del año pasado habría sido el triple de profunda, pero es una comparación de manzanas y naranjas, puesto que la UE cuenta con estabilizadores automáticos que han protegido los empleos de millones de personas», ha recordado Georgieva.

En cualquier caso, ha insistido en que la vacunación supone actualmente el factor económico más importante, recordando que acelerar la inmunización frente a la Covid-19 proporcionaría un impulso adicional de 9 billones de dólares hasta 2025 a la economía global, el 60% para las economías emergentes y el 40% a las desarrolladas, y esto permitiría recaudar billones de dólares adicionales en impuestos.

AUMENTAR LA RECAUDACIÓN.

Por otro lado, la economista búlgara ha defendido la necesidad de abordar el significativo incremento de la deuda a consecuencia de la crisis, en parte con el mayor crecimiento previsto, pero también a través de subidas de impuestos.

En este sentido, Georgieva ha celebrado el consenso aparente sobre la necesidad de fijar un impuesto mínimo de sociedades a nivel global, que considera que ayudará a combatir la elusión fiscal, además de incrementar la recaudación, aunque ha reconocido la importancia de tener en cuenta la situación de las economías en desarrollo y la dificultad de implementar la tasa.

«Llegar a un principio de acuerdo al respecto probablemente sea más fácil que la implementación de los detalles», ha admitido.

Asimismo, la directora del FMI ha destacado los progresos realizados sobre la fiscalidad de los servicios digitales, que ha señalado como uno de los sectores ganadores durante la reciente crisis.