Urkullu reivindica el «derecho inalienable a la verdad» de las víctimas del terrorismo

El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha reivindicado el «derecho inalienable a la verdad» de todas las víctimas del terrorismo y de otras vulneraciones de derechos humanos, «sin equiparaciones ni exclusiones», y ha reiterado la necesidad de que los «victimarios» reconozcan «la injusticia del daño causado».

Urkullu ha participado este miércoles en una sesión extraordinaria del Consejo Vasco de Participación de Víctimas del Terrorismo, celebrada en Vitoria con motivo del ‘Día Europeo de las Víctimas del Terrorismo’, que se conmemora el 11 de marzo.

En su intervención, el lehendakari ha explicado que, a través de esta conmemoración, se trata de «mantener viva la llama del recuerdo a todas las víctimas del terrorismo».

Iñigo Urkullu ha agradecido a los colectivos de víctimas que participan en el Consejo la entrega de un documento en el que, entre otras cuestiones, plantean la posibilidad de que miembros de ETA arrepentidos ofrezcan su testimonio en las aulas. Además, en el texto se pide que se erradiquen «los homenajes públicos a terroristas y la exaltación de sus símbolos».

TRABAJO «DISCRETO Y FRUCTÍFERO»

El lehendadakari ha afirmado que el documento es «una prueba más» del trabajo «intenso, discreto y fructífero» de las organizaciones representadas en el Consejo Vasco de Participación de Víctimas del Terrorismo.

Urkullu ha afirmado que el texto «no es flor de un día», sino que se trata de el resultado de «un largo proceso de reflexión, diálogo y debate a lo largo de más de tres años». El documento -ha añadido- supone «una aportación de especial valor añadido para mejorar las políticas públicas» en materia de víctimas.

El lehendakari ha agradecido a los colectivos de damnificados por el terrorismo su «voluntad» y su «compromiso generoso y valiente». «Manifestáis una vez más una voluntad constructiva, orientada al encuentro y la convivencia», ha afirmado.

SIN «ODIO» NI «VENGANZA»

El máximo responsable del Gobierno Vasco ha destacado que dicha voluntad «nace del sufrimiento padecido, de la resiliencia» y de la convicción de que ese sufrimiento «nunca debió ocurrir y no debe repetirse». Urkullu ha señalado que en esa actitud de las víctimas «no hay lugar para el odio y la venganza».

Urkullu ha subrayado que lOS damnificados por el terrorismo son «sujetos activos en la construcción de la convivencia». «Las víctimas no son solo pasado, sois, también, presente y futuro a construir», ha manifestado.

El lehendakari ha reivindicado el «valor» de «todas las víctimas». De esa forma, ha recordado a los damnificados por el terrorismo de ETA, cuyos asesinatos, atentados, extorsiones o amenazas han constituido –según ha recordado– «la más grave violación del derecho a la integridad y la vida durante décadas».

ATENTADOS «NO INVESTIGADOS»

También se ha referido a las víctimas de «organizaciones terroristas de la extrema derecha», entre las que ha citado al GAL, el Batallón Vasco Español o el GAE, muchos de cuyos atentados –según ha recordado– «no fueron ni siquiera investigados».

El lehendakari ha aludido, asimismo, a las víctimas de las «nuevas formas de terrorismo internacional«, así como a los damnificados de «todas las vulneraciones de los derechos humanos».

«Todas las víctimas, sin equiparaciones, sin exclusiones, tienen el derecho inalienable a la verdad. Todas las víctimas tienen derecho a la memoria, reconocimiento, reparación y justicia», ha subrayado.

El lehendakari ha manifestado que en Euskadi «emprendimos este camino hace ya un tiempo», aunque ha reconocido que ese recorrido se inició «más tarde de lo que en justicia hubiera sido necesario». En todo caso, se ha comprometido a seguir avanzando por esa vía, en la que «todavía hay etapas por cubrir».

«REFLEXIÓN CRÍTICA»

En ese sentido, ha afirmado que los «victimarios» tienen la «responsabilidad» de «reconocer la injusticia del daño causado». «Es necesaria una reflexión crítica sobre el pasado en términos éticos: fue injusto», ha manifestado.

El lehendakari ha subrayado que «hoy miramos al futuro con esperanza y determinación», con el fin de «asentar un marco de convivencia en el que la diversidad sea asumida como un valor y no como una pesada carga que resignadamente estamos obligados a asumir». «Queremos y debemos seguir contribuyendo a cubrir ese recorrido de memoria, reconocimiento, reparación y justicia», ha señalado.

Iñigo Urkullu ha afirmado que el futuro ha de asentarse en cuatro bases: «la dignidad de la persona», la «garantía efectiva» de los derechos humanos, la «deslegitimación radical» de la violencia, y el reconocimiento «sincero» de quienes piensan diferente.

En el acto también ha intervenido el presidente del Consejo Vasco de Participación de Víctimas del Terrorismo, José Luis de la Cuesta, quien ha resumido el documento que este organismo ha entregado al lehendakari y ha destacado la necesidad de «avanzar en el reconocimiento de que toda acción violenta fue una injusticia».