El portavoz del Gobierno Vasco, Bingen Zupiria, espera que, en la Comisión Interterritorial de Salud, se pueda llegar a «un mínimo denominador común que permita abordar estas fechas con cierta homogeneidad, de forma que, más o menos, las indicaciones y las normas sean parecidas en todas partes» y sean «más fáciles de cumplir y de hacer cumplir».
«El marco de Euskadi, salvo que cambien mucho las cosas a mejor o a peor, porque vivimos en esa incertidumbre permanente, es el que está establecido en el Decreto del lehendakari, que está en vigor. Esas son las pautas que consideramos más favorables para hacer frente a esta situación y las más eficaces», ha manifestado en una entrevista en Onda Vasca.
Por tanto, esta será la posición que defenderá la consejera de Salud, Gotzone Sagarduy, en la interterritorial de esta tarde. Además, ha asegurado que hay una comunicación permanente y directa entre Euskadi y Navarra, Cantabria, Aragón, La Rioja y Castilla y León, y «la posición es muy parecida entre los responsables sanitarios de todas estas comunidades».
Se trata, según ha explicado, de una posición favorable a mantener los cierres perimetrales autonómicos, de forma que sea posible la movilidad dentro de cada propia comunidad, sin pasar a otras, y que sigan los horarios de toque de queda que están en vigor y de finalización de los horarios de actividades hosteleras o culturales.
No obstante, ha precisado que «todo siempre es susceptible de cambio en función de cuál sea la evolución» de la epidemia. Además, ha dicho que en Semana Santa los vascos deberían quedarse en Euskadi.
«Deberíamos hacer el ejercicio de pensar en el próximo verano. ¿Cuál sería el ideal?. El ideal sería que fuéramos capaces, de forma colectiva, de hacer frente a las tasas de contagio para que estas sigan disminuyendo, que fuéramos capaces de quitar presión al sistema sanitario, porque todavía hay mucha presión en las UCI y hospitales, y luego, hemos abierto mucha actividad económica, mucha actividad social y tenemos que encontrarle la medida», ha apuntado.
Por ello, ha dicho que, «si fuera posible mantener comercios y hostelería abiertos, aunque sea con restricciones de aquí al verano, sería una buena noticia». «Pero, sobre todo, también nos hemos puesto como prioridad mantener la actividad económica industrial, que está funcionando desde hace más de un año en buenas condiciones, y la asistencia presencial a clase en todo el sistema educativo, que se está cumpliendo».
«Este es el reto que todos tenemos como sociedad», ha indicado, para precisar que «el horizonte del verano hay que ponérselo como una meta». «Todos debemos ser conscientes de las situaciones e inconvenientes que podemos provocar con comportamientos no adecuados», ha aseverado.