El PP critica el retraso del «fondo fantasma» a empresas

La portavoz del PP en el Congreso, Cuca Gamarra, ha criticado este martes en el Congreso el retraso del Gobierno para aprobar la línea de ayudas anunciadas por el presidente Pedro Sánchez hace dos semanas y ha pedido que en el Ejecutivo de coalición el PSOE y Unidas Podemos «abandonen la política de propaganda, que genera expectativas y esperanzas frustradas, y se pongan a trabajar de verdad»: «Menos conflictos internos y más ayudas directas a la empresa», ha dicho.

Y es que en una rueda de prensa celebrada tras la Junta de Portavoces de la Cámara Baja este martes, Gamarra ha lamentado que, finalmente, el Ejecutivo no haya aprobado en el Consejo de Ministros estas ayudas, algo que ha atribuido a que las formaciones de Gobierno «no están donde realmente están las preocupaciones de los españoles y sus problemas».

Gamarra ha destacado que desde el inicio de la crisis «se han destruido 102.000 empresas», lo que viene a suponer, ha calculado, unas 280 empresas diarias. «Cada día de retraso en la puesta en marcha del fondo significa que 280 empresas cierran y dejan de generar empleo», ha incidido.

Asimismo, la portavoz parlamentaria de los ‘populares’ ha señalado cómo otros gobiernos europeos, como Italia, Francia, Bélgica o Portugal ya han aplicado este tipo de ayudas a las empresas, algunos incluso desde los primeros compases de la pandemia.

En todo caso, Gamarra ha insistido en que los 11.000 millones de euros planteados por el Gobierno para las empresas –no todos a ayudas directas, que se limitarían según algunas informaciones a unos 5.000 millones– no bastan para responder a las necesidades de las empresas.

«Nuestro planteamiento es 50.000 millones de euros en un fondo de ayudas directas a todo nuestro tejido económico», ha reclamado Gamarra, que asegura que únicamente para la hostelería y el turismo serían necesarios 12.500 millones, pero que otros sectores también necesitan apoyos.

La política riojana ha llamado a complementar las ayudas directas con la refinanciación de los créditos que tienen ‘vivos’ las empresas, pero atendiendo al riesgo de dañar a la banca: «Al sector financiero también hay que protegerlo, no vaya a ser que, queriendo arreglar una cosa, estropeemos otra y generemos un problema mayor», ha dicho.

A LA ESPERA DEL PLAN DE AYUDAS DIRECTAS

El Gobierno contemplaba este martes la aprobación de esta línea de ayudas anunciada por Pedro Sánchez hace ya dos semanas, algo que ahora se espera para el viernes en un Consejo de Ministros extraordinario.

Sin embargo, el Ejecutivo aún no ha concretado cómo se gestionarán estos fondos, ni tampoco qué peso tendrán las exigidas ayudas directas para compensar costes fijos y pérdidas de las empresas más afectadas por la crisis provocada por la pandemia de Covid-19 y sus restricciones.

Diversas informaciones publicadas en medios apuntan a que, de los 11.000 millones anunciados por Sánchez, 5.000 millones irían a ayudas directas a las empresas, 1.000 millones para la capitalización de sociedades y otros 5.000 millones para reestructuraciones de deuda.

Las exigencias de Unidas Podemos planteadas para ese decreto ley que debe aprobar el Ministerio de Asuntos Económicos de Nadia Calviño es que, al menos, se dediquen 8.000 millones en ayudas directas, sujetas a condiciones como el mantenimiento del empleo o una tributación por ingresos reales, y no limitarlas a sectores determinados.