¿Cómo elegir un buen proyector y cuáles el adecuado? Guía de recomendación

En una era marcada por el consumo de ocio desde casa, con las plataformas que ofrecen contenido en streaming en pleno auge, cada vez hay más personas que se interesan por los proyectores como equipos que permiten disfrutar de una mejor experiencia de imagen y audio.

Hoy mostramos una pequeña guía a modo de recomendaciones para que tengas claro cómo elegir el proyector que mejor se adapte a tus necesidades, teniendo en cuenta que hay modelos muy económicos, menos de 100 euros, hasta otros que elevan su precio por encima de los 10.000 euros.

¿Qué tipos de proyectores existen?

Los proyectores se distinguen atendiendo a su tecnología, de modo que tenemos equipos LCD y DLP. Los primeros, los proyectores LCD, son los más simples. Su funcionamiento es el más sencillo, la luz blanca de la lámpara se divide en los colores primarios: rojo, verde y azul, y pasa a través de las pantallas LCD.

Así se crea una imagen de color reconocible que da lugar a tonos muy vivos, de alta calidad y muy naturales. Estos equipos tienen una duración de unas 2.000 a 4.000 horas, nos referimos a la lámpara que incluyen, y son los más habituales en el ámbito doméstico.

Por su parte, los DLP presentan como ventaja su menor grado de mantenimiento. No incluyen filtros que han de limpiarse y su funcionamiento consiste en millones de pequeños espejos que proyectan los colores en la pantalla.

Esta inmensa cantidad de espejos permite que la imagen en la pantalla sea extremadamente fina y no aparezcan puntos en la imagen. Su vida media es más larga. Para fabricarlos se utilizan materiales pensados para maximizar el rendimiento y diferenciar claramente el brillo del contraste, con el objetivo de ofrecer una imagen más real.

¿Para qué vas a usar el proyector?

Las tecnologías LCD y DLP son las más comunes para proyectores domésticos, pero si queremos acudir a otros usos más sofisticados podemos acudir a los modelos tipo LED, LCoS y láser. A su vez, otro aspecto diferencial es el tipo de conectividad. Hasta hace unos años, los puertos RGA y VGA eran los más habituales, pero en la actualidad se utilizan conexiones HDMI, USB, Bluetooth y WiFi. Las posibilidades de un modelo se amplifican si incluyen varias de estas conexiones.

Otra clasificación que se puede hacer es estudiando el tipo de uso, esto es, acudiendo al contexto de utilización. En el mercado encontramos proyectores de bolsillo, diseñados especialmente para conectar a smartphones, aunque igualmente son válidos con otros equipos. Estos modelos ofrecen una buena calidad y alto nivel de contraste, resolución, ratio de proyección e incluso luminosidad.

No obstante, son menos potentes que los proyectores para gaming, que requieren un tiempo de  respuesta más rápida y las cualidades de sonido e imagen se ven simplificadas para sacar partido del equipo al que se conectan.

Por otro lado, tenemos también los proyectores portátiles, que son muy similares a los de bolsillo, pues conservan sus especificaciones, pero tienen un tamaño más reducido.

Algunos modelos incluyen también TDT incorporada, es decir, transmiten directamente los canales de televisión en abierto. A pesar de que estamos en una era de ascenso de las plataformas de contenido en streaming, la televisión tradicional sigue siendo un formato de alto consumo.

Por último, debemos hablar de los proyectores para exteriores, que cuentan con dimensiones de calado para espacios como terrazas o jardines. Si bien su uso no es el óptimo en condiciones de plena luz solar, sí funcionan mejor que otros equipos cuando todavía queda algo de iluminación. Estos equipos han de usarse junto a una buena superficie de proyección, para matizar las sombras y sacar partido del contraste y la resolución.

¿Cuánto vas a utilizar el proyector?

Esta pregunta es también importante, pues si el uso es limitado, quizás convenga apostar por equipos con menor tiempo de vida, nos referimos a las lámparas, por lo que habría que apostar por un modelo LCD, frente a los DLP o los de tipo LED.

No obstante, todas estas cuestiones están a menudo enfrentadas frente a la capacidad de gasto. Si tu presupuesto es limitado y estás buscando proyectores económicos que cumplan tus expectativas, te recomendamos que busques información antes de comprar un modelo concreto. Hay guías de webs especializadas que te ayudarán, por ejemplo aquí tienes los proyectores más baratos que puedes encontrar en el mercado.

¿Dónde comprar un buen proyector?

Por otra parte, si estás un poco perdido en cuanto a marcas y modelos de proyectores de vídeo para casa, te dejamos esta web para hacerte más fácil la compra. La clave está en determinar qué uso vamos a hacer del proyector, cuánto lo vamos a usar y en qué condiciones, así como conocer aspectos relacionados con la conectividad.

Un buen proyector en casa nos llevará, sin duda, a una mejor experiencia visual y de sonido, sin importar el uso que hagamos de él: ver series y películas, jugar o incluso que sirva como elemento de aprendizaje para los más pequeños.