Madrid limita salidas y visitas a residentes dos meses por la vacunación

a Comunidad de Madrid restringirá a partir del lunes las salidas y visitas de usuarios de las residencias de mayores de la región durante 8 semanas para garantizar la seguridad del proceso de vacunación contra el coronavirus, que actualmente «va a un buen ritmo de 3.000 personas al día».

Así lo ha anunciado, en una entrevista concedida a Europa Press, el consejero de Políticas Sociales, Familias, Igualdad y Natalidad de la Comunidad de Madrid, quien asegura que la Consejería de Sanidad, encargada del proceso, no les ha reportado ningún problema grave.

«El ritmo es adecuado y en dos o tres semanas se habrá puesto la primera dosis en nuestra red de atención residencial, incluidos los centros de discapacidad y enfermedad mental. Luego hay 21 días para poner la segunda dosis«, ha indicado Luengo.

Por eso, su Consejería, en coordinación con la de Sanidad, han establecido un nuevo protocolo, pasadas las vacaciones navideñas, de ocho semanas más limitativo. Así, desde el lunes se elimina el criterio de inmunidad y las restricciones se condicionan al nivel epidemiológico de la Comunidad. Ahora mismo con el nivel más alto quedarían restringidas las salidas a dos veces por semana, una hora y por las inmediaciones del centro. Las visitas de familiares se reducen a una a la semana.

Respecto al caso de una residencia de Valdemoro en la que pusieron la vacuna a voluntarios, sacerdotes y familiares de usuarios también, el titular regional de Políticas Sociales lo ha condenado porque «no le parece ni ético ni adecuado» y ha recalcado que la Consejería de Sanidad investigará el caso y tomará las medidas oportunas.

Según Sanidad Pública, la residencia que vacunó del Covid-19 a familiares de usuarios y sacerdotes se enfrenta a una sanción administrativa de entre 3.000 y 15.000 euros y se verá si puede haber «no solo posibilidad de infracción administrativa».

«Esperamos que sea un acto puntual, se ha reconocido por la propia residencia y se ha pedido disculpas. No ha habido otro caso más. Nuestra prioridad es que se vacune de la manera más rápida posible y que se vacune a todos y en las mejores condiciones», ha concluido Javier Luengo.

INFORMACIÓN ADICIONAL A LOS CENTROS SOBRE LA VACUNA

A finales de diciembre, la Dirección General de Coordinación Sociosanitaria y la Dirección General de Atención al Mayor de la Comunidad enviaron a los geriátricos una documento, al que ha tenido acceso Europa Press, en el que daban información adicional sobre las vacunas del Covid.

Así, recordaban que dichas vacunas no enferman de coronavirus y ayudarán a evitar que se contraiga la enfermedad. Todas las vacunas contra el Covid-19 que se están desarrollando o distribuyendo están siendo sometidas a evaluaciones exhaustivas en ensayos clínicos y serán aprobadas o autorizadas solo si reducen de manera sustancial la probabilidad de contraer el coronavirus.

Además, indican que vacunarse también puede proteger a las personas a su alrededor, en especial aquellas con mayor riesgo de enfermar gravemente. «Los ensayos clínicos de todas las vacunas primero deben demostrar que son seguras y efectivas antes de que se pueda autorizar o aprobar el uso de una vacuna específica, incluidas las vacunas contra el Covid-19», añaden.

Y es que según explican desde la dirección regional, los beneficios conocidos y posibles de una vacuna contra el Covid-19 deben superar los riesgos conocidos y posibles de la vacuna para que se utilice en virtud de lo que se conoce como Autorización para Uso de Emergencia.

Contagiarse de coronavirus podría generar algo de protección natural, conocida como inmunidad; pero los expertos no saben cuánto tiempo dura esta protección, y el riesgo de enfermarse gravemente y morir a causa del Covid-19 es mucho más alto que cualquier beneficio que pueda aportar la inmunidad natural, apuntan.

Así, las vacunas ayudarán a protegerlo al crear una respuesta de generación de anticuerpos (sistema inmunitario) sin que deba sufrir la enfermedad.

También aseguran que usar mascarillas y respetar el distanciamiento social son prácticas que ayudan a reducir la probabilidad de exposición al virus o de propagarlo a otras personas, pero estas medidas «no son suficientes».

Las vacunas actuarán sobre su sistema inmunitario para que esté en condiciones de combatir el virus si se ve expuesto al mismo. «Detener una pandemia exige usar todas las herramientas a nuestra disposición», agregan en dicho documento.