La crisis no está olvidada, pero sí mejorada. Los buenos números, indicios y sensaciones nos demuestran que el Real Madrid, precisamente después de la dolorosa derrota ante el Shaktar en Champions, ha ido en clara posición ascendente. Es obvio que no se han olvidado todos sus males, también porque hay errores que permanecen, pero sí que los de Zidane no están tan ahogados.
Esto se palpó frente al Atlético de Madrid en el Alfredo di Stéfano, un derbi del cual los rojiblancos partían como favoritos... pero que Zidane supo dar la vuelta reflejando un gran encuentro que se hizo aún más notable contra el Borussia Mönchengladbach, donde se selló (en graves apuros) la clasificación para los octavos de final de la liga de Campeones. Ese pudo pudo ser un partido de inflexión para Zidane. Los repasamos.
1Un necesario paso adelante de Zidane y el Real Madrid

Es justo decir que la solidez en el Real Madrid se ha abierto paso. Desde las dos partidos perdidos consecutivos en Liga y Champions (Alavés y Shaktar) el Real Madrid de Zidane ha sabido adaptarse a un curso que, si bien todavía está lejos del nivel esperado y del rendimiento justo de varios de sus jugadores, actualmente han ocupado el necesario paso adelante.
Porque a raíz de aquellos dos partidos, Zidane ha girado las caras del madridismo y los blancos se han hecho con victorias ante el Mönchengladbach, Atlético de Madrid, y Athletic de Bilbao, estos dos últimos, a priori, dos equipos que podían ahondar en una crisis donde Zidane se encontraba en la rampa de salida. Sin embargo, el técnico francés corrigió algunos flecos y desde entonces han sido todo victorias. Un mérito colectivo con un denominador claro: la actitud de los jugadores.