Esther Doña ha tenido un año muy complicado después de perder a su marido, Carlos Falcó, a causa del coronavirus. Algo, a lo que se suma la escasa o nula relación que mantiene con los hijos de su difunto marido. Pero, ¿la han abandonado a su suerte?
3La rivalidad con Tamara Falcó
Esther ha insistido en que este año la ha puesto a prueba de la forma más brutal, aunque también la ha hecho ser más consciente de la realidad que la rodea. "Me he acercado más a la realidad, pues te haces más cómplice con otras personas que están viviendo situaciones también muy duras y no son tan afortunadas como yo". Y en cuanto a la herencia, Esther Doña ha demostrado que está abierta al diálogo con los hijos de su marido. "Con los hijos de Carlos no hay conflictos. Estamos trabajando para llegar a un acuerdo en el que estemos todos satisfechos. Hablando se entiende la gente", ha reconocido, aunque, eso sí, ha confesado que Carlos la dejó como usufructuaria de todos sus bienes. "Se están cumpliendo algunas de sus voluntades y estoy segura de que así seguirá siendo". Ante todo, Esther insiste en que ella demostrado su buena voluntad, tanto al dejar la finca como en facilitar las cosas a los hijos de su difunto marido.
Sin embargo, siempre se ha insinuado una posible rivalidad con Tamara Falcó, algo que ella se ha encargado de desmentir: "Creo que eso es algo de la prensa, desde luego por mi parte no hay rivalidad alguna y creo que por la de ella tampoco". Algo, que contrarresta con la actitud de Tamara, quién no se molestó ni en darle el pésame. Y es que la propia Esther Doña reconocía en una ocasión: "Hubo una relación más cercana cuando comenzamos a salir. A mí me dijo Carlos que habló con Tamara y le dijo que me había conocido. Le enseñó una foto y ella le dijo : "Me encanta para ti". Pero fue a raíz de la boda cuando todo se distanció".
Además, en cuanto al resto de los hijos del fallecido marqués, todo indica que las cosas estarían bastante tensas, a pesar de lo que quieran hacer creer. "No tenemos relación, pero que no tengamos relación no significa que estemos enfrentados. La relación es cordial cuando hemos tenido que comunicarnos o, por ejemplo ahora, cuando falleció mi padre, recibí el pésame de alguno de ellos, pero no voy a estar mencionando nombres".





