El sector floral confía en tener una «buena campaña» de Todos Los Santos a pesar de la incertidumbre que puede provocar el coronavirus, según ha informado la Asociación Española de Floristas en un comunicado.
En concreto, el sector de la flor cortada y planta ornamental se ha visto muy afectado por la crisis de la Covid-19 y confía en reactivar el negocio durante la celebración del 1 de noviembre.
Los floristas confían en sus clientes habituales, además, de en la venta telefónica y ‘online’, sus principales canales en los últimos meses.
Dada la antelación que este sector precisa para planificar la campaña, desde hace meses, la asociación se ha dirigido a las administraciones públicas, en concreto a las consejerías de Sanidad de las comunidades autónomas y Ayuntamientos, con propuestas para tratar de establecer un escenario más certero, dentro de los distintos escenarios posibles.
De esta forma, ha solicitado un protocolo específicamente diseñado para el Día de Todos los Santos con medidas y recomendaciones para una celebración segura de esta festividad. Así, entre las propuestas figuran espaciar lo máximo posible la celebración de esta festividad para reducir el número de personas que pudieran coincidir al mismotiempo en la visita a los cementerios, ampliar los horarios de los camposantos, controlar el aforo y garantizar la distancia mínima de seguridad.
Las floristerías han innovado en lo que respecta a los productos y han potenciado el servicio de reparto a domicilio para ofrecer facilidades a los clientes y promover las ventas.
Tras las experiencias pasadas, los floristas están siendo prudentes a la hora de aprovisionarse de género para esta campaña para ajustar mejor los volúmenes de compra y venta, por lo que piden a los clientes que anticipen sus encargos.