El coste por hora trabajada se dispara un 8,2% por el impacto del Covid-19

El coste por hora trabajada aumentó un 8,2% en el segundo trimestre respecto al mismo periodo de 2019, su mayor alza desde 2014, debido a la situación derivada de la pandemia provocada por el Covid-19 y la declaración del estado de alarma desde mediados de marzo que ha provocado una disminución de las horas trabajadas superior a la observada en los costes, según los datos provisionales del Índice de Coste Laboral Armonizado (ICLA) publicados este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Por componentes, el coste salarial se incrementó un 6,2% en relación al segundo trimestre de 2019, en tanto que los otros costes avanzaron un 14,3%. Este coste, excluyendo pagos extraordinarios y atrasos, creció un 7,6% interanual en el segundo trimestre de 2020.

Eliminando los efectos estacionales y de calendario, el coste laboral por hora trabajada avanzó un 8,3% en el segundo trimestre en relación al mismo periodo de 2019.

Con este repunte, se encadenan doce trimestres de tasas positivas en la serie corregida.

En tasa trimestral (segundo trimestre sobre primer trimestre), el coste laboral por hora trabajada aumentó un 5,4% en la serie corregida de efectos estacionales y de calendario.

Sin tener en cuenta ambos efectos, el coste laboral se disparó un 12,7% entre abril y junio de este año debido, fundamentalmente, al mayor peso de los pagos extraordinarios y atrasos en el segundo trimestre de este año respecto al trimestre anterior.