El CSIC iniciará los ensayos en animales de una vacuna contra el Covid-19 esta semana

Investigadores del Centro Nacional de Biotecnología del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) iniciarán esta semana los ensayos preclínicos con animales de una posible vacuna contra el coronavirus Covid-19.

El grupo desarrolla un proyecto de vacuna a partir de una modificación del virus usado en la erradicación de la viruela en los años 70 del siglo XX.

En concreto, utilizan una cepa muy atenuada del virus Vaccinia -de la familia del virus de la viruela- como vector viral, para insertarle genes del nuevo coronavirus que puedan inducir una buena respuesta inmune frente al SARS-CoV-2.

Según los investigadores, «hay posibilidades reales de inducir protección utilizando esta aproximación con una sola dosis de la vacuna», lo que se ha conseguido en proyectos anteriores del laboratorio para la generación de vacunas contra ébola, zika y chikungunya.

PROCESO DE PRODUCCIÓN

El proceso de generación de una vacuna pasa por varias fases, que necesitan varios meses cada una.

La primera es la generación del prototipo de vacuna en el laboratorio mediante ensayos en células en cultivo.

En el caso de la vacuna que investiga este grupo, se aislaron virus recombinantes que expresaban de forma estable el gen del coronavirus SARS-CoV-2. Esta fase ya ha sido completada.

En la segunda etapa se pueden comenzar los ensayos preclínicos con modelos animales. Su objetivo es demostrar que la vacuna es inmunogénica y eficaz -produce una respuesta inmune protectora frente al patógeno-, y no causa efectos adversos.

A continuación se pasaría a la fase clínica con humanos, que a su vez tiene varias etapas. En primer lugar, se evalúa su seguridad en voluntarios sanos, que no tienen la enfermedad, para confirmar que la vacuna no induce efectos adversos. Después se estudia su eficacia en personas que están expuestas al virus, a fin de confirmar que se genera respuesta inmune y que esta respuesta inmune, protege.

De manera paralela, se debe estudiar la manufactura de la vacuna a gran escala y confirmar así que se pueden obtener las miles de dosis necesarias para la población y que conserva las propiedades con las que se había diseñado, manteniendo su eficacia y seguridad.

(SERVIMEDIA)