La mesa para la reconstrucción social y económica tras el coronavirus que promueve el Gobierno y que arrancará mañana se fija la primera quincena de julio como la fecha para aprobar un acuerdo entre las fuerzas políticas, los agentes sociales y las administraciones.
Así consta en el documento base que ha remitido el Ejecutivo a los participantes y al que tuvo acceso Servimedia. Tras la primera reunión, el documento establece que en el mes de mayo se desarrollarán las reuniones de los distintos grupos de trabajo y que el 1 de junio es el límite del plazo para elevar a la mesa las conclusiones y propuestas de los grupos de trabajo y de la mesa de diálogo social.
A lo largo de junio tendrá lugar el debate de las propuestas y acuerdos por la mesa y, finalmente, para la primera quincena de julio se prevé el llamado «acuerdo interinstitucional entre el Gobierno de España, las comunidades autónomas y las entidades locales para la implementación de los pactos de reconstrucción».
El documento recalca este carácter «interinstitucional» del acuerdo desarrollando que «todas las administraciones públicas, respetando el reparto competencial de nuestro modelo constitucional, deberán colaborar en su implementación para garantizar la plena eficacia y aplicación de los pactos alcanzados».
Para la reunión de mañana de la mesa ya se ha fijado un orden del día que comenzará con una exposición de la situación actual y previsiones de la epidemia y la necesidad de acuerdos para la reconstrucción social y económica del país.
Seguidamente, el Gobierno explicará su propuesta de metodología de trabajo para la mesa. En concreto, sus funciones, composición y funcionamiento, la determinación de los grupos de trabajo, su composición y funcionamiento, el establecimiento de otros foros y la planificación temporal, para concluir con los habituales ruegos y preguntas.
La propuesta de metodología del Gobierno, que se plantea como «abierta» y por tanto sujeta a las aportaciones de los grupos, se fija dos objetivos. Por un lado, «lograr un gran consenso político y social para la reconstrucción y la salida de la crisis provocada por el Covid-19» y «recuperar el crecimiento y la creación de empleo lo antes posible». Por otro, «fortalecer nuestro sistema sanitario y nuestro sistema de protección social, con el fin de garantizar la solidaridad con los sectores más afectados y desprotegidos».
En cuando a la composición de la mesa, establece que, «por parte del Gobierno, asistirán el presidente, que liderará la primera reunión y aquellas que considere oportuno, y los cuatro vicepresidentes, que también asistirán a la primera reunión y cuando se considere oportuna su presencia en razón de los temas que se vayan a tratar».
La vicepresidenta primera, Carmen Calvo, «coordinará el trabajo de la mesa» cuando no esté Pedro Sánchez. Por parte del resto de grupos parlamentarios, asistirán sus respectivos portavoces.
GRUPOS DE TRABAJO
El Gobierno propone distinguir cuatro grupos de trabajo, que abordarán las cuestiones antes de elevarlas a la mesa. Uno se dedicará a la reactivación económica, con «especial atención a los sectores económicos más afectados», y que también tratará los temas de educación, ciencia e investigación y cualquier otra materia que se acuerde.
El segundo se centrará en el Estado del bienestar, las políticas sociales y el sistema de cuidados. Un tercer grupo de trabajo se encargará de la sanidad pública y analizará el sistema para reforzarlo de cara a planificaciones futuras. El cuarto y último se dedicará al ámbito europeo.
Esos grupos de trabajo se reunirán preferentemente en el propio Congreso de los Diputados y contarán cada uno con un máximo de 3 miembros del Gobierno, de 7 del PSOE, de 6 del PP, de 5 de Vox, de 4 de Unidas Podemos, de 3 de ERC; de 2 de Ciudadanos, JuntsxCat y PNV, y de 1 del resto de partidos con representación en el Congreso.
Cada grupo tendrá un coordinador designado por el Gobierno y otro coordinador adjunto nombrado por acuerdo de los partidos, e invitará a «expertos o representantes de entidades de la mayor relevancia en cada ámbito, para que realicen una exposición, estructurada en diagnóstico y recomendaciones, de no más de media hora de duración»; tras la exposición, los miembros del grupo de trabajo debatirán y, según los plazos mencionados, elevarán conclusiones a la mesa. Los miembros del Gobierno podrán asistir a las reuniones de los grupos de trabajo.
OTROS FOROS
Aparte de estos grupos, el documento incluye un apartado bajo el título «otros foros de diálogo», donde se señala que «el Gobierno continuará convocando y dará continuidad a los trabajos de la mesa de diálogo social con los agentes sociales (CEOE, CEPYME, UGT y CCOO) para recabar sus aportaciones», y que «los acuerdos que se logren se elevarán para consideración a la mesa».
Igualmente, señala que el presidente, Pedro Sánchez, «continuará convocando, cuando corresponda, la Conferencia de Presidentes autonómicos para el proceso de diálogo con el fin de recibir aportaciones», y también a la FEMP «para conocer las propuestas de las entidades locales».
Fuentes gubernamentales aseguraron a Servimedia que este documento fue consensuado con el presidente del PP, Pablo Casado, en la videoconferencia que Sánchez mantuvo con él esta misma mañana.
Por su parte, fuentes populares apostillaron a esta misma agencia que, con tal redacción, «la mesa se reconduce a comisión parlamentaria como pedíamos nosotros el miércoles», de forma que, “si quiere pactar algo, tendrá que ser aquí con luz y taquígrafos”, como exhortó Casado el pasado miércoles en el Pleno de la Cámara Baja al jefe del Ejecutivo.
SERVIMEDIA