Autismo España reclamó este jueves que las personas con TEA sean consideradas como población de alto riesgo y prioritaria para que no queden fuera de los protocolos clínicos de atención por coronavirus, «ni en la detección ni en la hospitalización».
En un comunicado con motivo del Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo que se celebra este jueves, señaló que «la discapacidad nunca puede ser un factor de discriminación que atente contra los derechos humanos e instó a vigilar estos protocolos y a respetar la igualdad de oportunidades de las personas con discapacidad y su derecho a la salud».
Además, pidió la implantación de “ajustes razonables” en la hospitalización de las personas con TEA contagiadas por Covid-19, a fin de minimizar los efectos sobre su bienestar emocional e integridad. Entre ellos, propuso flexibilizar las medidas que establecen el ingreso individual y el aislamiento de la persona afectada, permitiendo el acompañamiento en todo momento por parte de una persona cercana (familiar o profesional).
También recomendó contar con el asesoramiento y la orientación de familiares o profesionales especializados que conozcan a la persona y ayuden a establecer las medidas específicas en cada caso particular, proporcionando un entorno lo más estable posible.
Asimismo, criticó que «la carencia absoluta de recursos básicos de protección, limpieza y desinfección, así como de material sanitario, aumenta alarmantemente el riesgo de contagios, tanto de las personas con TEA como de los profesionales que los atienden». Así se suceden más bajas de profesionales y, «en última instancia, el colapso», destacó.
Por otro lado, alertó de que la propia falta de recursos económicos debido a la interrupción de los conciertos con las administraciones públicas pone en riesgo la sostenibilidad de los servicios especializados que prestan las entidades a las personas con TEA y sus familias. «Si no se ponen en marcha medidas contundentes de apoyo financiero y fondos extraordinarios que palíen esta situación, puede perderse de manera irreversible buena parte de la red de servicios específicos para el colectivo», advirtió.
Según Autismo España, el confinamiento tiene efectos especialmente graves en el comportamiento de las personas con TEA. Debido a sus dificultades de flexibilidad de comportamiento y de pensamiento, estas precisan rutinas estables y predecibles y presentan dificultades para adaptarse a los cambios en su contexto, por mínimos que sean.
Por ello, algunas pueden experimentar altos niveles de estrés y ansiedad, manifestar un incremento de conductas negativistas y desarrollar dificultades de auto-regulación que ponen en riesgo su integridad física o la de las personas que les acompañan.
De ahí que algunas necesiten salir a la calle para no agravar el impacto que supone la situación de confinamiento. El problema, según la confederación, es que aunque está aprobada la instrucción que lo permite, muchas están siendo objeto de increpaciones e insultos cuando salen a dar estos pequeños paseos, acompañadas o no de algún familiar. Por ello, reclamó «la comprensión y concienciación del conjunto de la sociedad» sobre este derecho que les asiste, y defendió su ejercicio sin la necesidad de recurrir a ningún elemento identificativo (chalecos reflectantes, pañuelos azules, etc).
A medio o largo plazo, esto «puede resultar estigmatizante» e inducir, incluso, a un mal uso por parte de personas que quieran aprovecharse de dicha situación para eludir eventuales sanciones», concluyó.
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