Renfe se ha adjudicado un contrato de 6.000 millones de dólares (unos 5.557 millones de euros al cambio actual) para desarrollar el proyecto de alta velocidad que unirá las ciudades de Houston y Fort Worth (Dallas), en Estados Unidos.
Su adjudicación la anunció hoy el ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, que subrayó que supone el mayor contrato jamás adjudicado a una empresa pública española y consolida a Renfe “como una de las principales operadoras ferroviarias del mundo”, al ser la encargada de trazar la primera línea de alta velocidad de EEUU.
Su asignación es fruto del acuerdo suscrito entre Renfe Operadora y Texas Central en 2019 para desarrollar el proyecto de alta velocidad entre ambas ciudades estadounidenses. El contrato vinculará además a Renfe con el mayor operador ferroviario mundial de capital privado, Texas Central, hasta el año 2042.
Para Renfe supone consolidar su participación en un proyecto histórico en el ferrocarril en EEUU a la vez que impulsar la expansión internacional establecida en el plan estratégico desarrollado por la compañía que preside Isaías Táboas.
El equipo de Renfe of América, sociedad constituida para el desarrollo de dicho proyecto y otros más en territorio americano, trabaja desde el pasado año en la fase de consultoría de la línea. Precisamente, Táboas se reunió a finales del pasado mes de enero en Houston con los responsables de Texas Central para detallar los avances del proyecto.
La constructora italiana Salvini será la encargada de construir la infraestructura que prevé tener lista en seis años y posteriormente entrará Renfe para encargarse de su mantenimiento y de operar los trenes entre ambas ciudades texanas desde 2026 hasta 2042.
En la fase de diseño y construcción, que se prolongará hasta el año 2026, Renfe ingresará 311 millones de dólares en concepto de supervisión y consultoría de la infraestructura, y durante los años siguientes de operación y mantenimiento (hasta el 2042) los ingresos esperados ascenderán a 5.611 millones de dólares.
Renfe avanzó además que el consorcio privado Texas Central podría plantearse también ampliar la línea de alta velocidad hasta las ciudades de Austin y San Antonio, con la consiguiente posibilidad de ampliar la colaboración entre ambas compañías.
UNIÓN ENTRE HOUSTON Y DALLAS
Por el momento, el tren de alta velocidad que unirá Houston, con Dallas y Fort Worth, que se encuentran a 386 kilómetros de distancia, prevé conectar las ciudades en menos de 90 minutos.
El trayecto tiene una longitud de 240 millas, equivalente a 386 kilómetros, y contará con estaciones en Fort Worth, Houston y una intermedia en Brazos Valley, todas ellas conectadas a la red de autopistas y a los sistemas de transporte público.
El tren de alta velocidad de Texas está promovido por Texas Central Partners, empresa privada apoyada por inversores y que prevé desarrollar el proyecto sin fondos públicos en el que lleva trabajando desde 2014 con las autoridades federales y estatales para su desarrollo.
De acuerdo con Texas Central, la línea de alta velocidad generará unos beneficios económicos en el estado de Texas que podrían alcanzar los 36.000 millones de dólares durante los próximos 25 años, incluyendo la creación de 10.000 puestos de trabajo al año en la fase de construcción y unos 1.500 puestos de trabajo permanentes una vez entre en servicio la línea. Una parte este empleo, aún por concretar, corresponderá a profesionales españoles.
(SERVIMEDIA)