Arrimadas propone a Sánchez «cuatro bases para un acuerdo constitucionalista»

La portavoz de Ciudadanos, Inés Arrimadas, entregó este lunes al presidente del Gobierno en funciones y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, un documento con «cuatro bases para un acuerdo constitucionalista», convencida de que si él da «el primer paso» en ese sentido el líder del PP, Pablo Casado, no tendrá más remedio que sentarse a hablar.

Según explicó en rueda de prensa tras la reunión en el Congreso de los Diputados, el grueso del encuentro se centró en la exposición por su parte de esa alternativa al «acuerdo del insomnio» con Podemos y que solo sumaría 155 escaños, por lo que necesitaría otros 21 votos de quienes tendrían «la llave» de la gobernabilidad.

Arrimadas denunció que Podemos «incorpora» en su discurso las tesis de ERC en cuanto al reconocimiento de Cataluña como nación que «necesita un referéndum de secesión», a la existencia de «presos políticos» y de un «conflicto político entre Cataluña y España obviando el conflicto generado por la Generalitat entre catalanes al violar nuestros derechos».

Dejó claro que ella no piensa solo en una investidura sino en la estabilidad de toda la legislatura, en las votaciones pleno tras pleno en las que los partidos nacionalistas y populistas «no pueden ser la llave de la gobernabilidad».

Le propuso por ello cuatro «bases» para un acuerdo constitucionalistas que podría sumar 221 escaños y que demustra, aseguró, la disposición de Ciudadanos «a ceder». La primera de ellas es que tanto la investidura como los Presupuestos Generales del Estado y las principales leyes se aprueben entre constitucionalistas, es decir, entre el PSOE, el PP y Ciudadanos.

La segunda es un pacto por la Educación, la tercera es la promesa de no subir impuestos a las clases trabajadoras, y la cuarta es una reforma electoral para introducir una barrera mínima de porcentaje de voto por debajo de la cual no se pueda acceder a la representación en el Congreso de los Diputados, lo que dejaría fuera de la Cámara a buena parte de los partidos nacionalistas y regionalistas.

EVITAR «DOLORES DE CABEZA»

En este último punto, se mostró abierta a negociar ese porcentaje y, aunque Albert Rivera siempre hablaba del 3%, Arrimadas habló incluso de un 4%, lo cual dejaría fuera también a ERC, el grupo nacionalista más grande del Congreso esta legislatura. Sería «un antes y un después», aseguró, porque sin costar un euro evitaría «muchos dolores de cabeza».

Son cuatro condiciones «muy básicas para hablar», aseguró Arrimadas, convencida de que esa vía es la preferida por la mayoría de los españoles y reclamando a Sánchez que «haga historia pero no para mal» sino «para bien», avanzando a un acuerdo que sería «histórico».

Aunque Sánchez persiste en defender su acuerdo con Unidas Podemos, Arrimadas insistió en que si quiere rectificar «tendría la vía abierta» para esa negociación por parte de Ciudadanos. Y aunque Casado sigue negando esa opción por considerar que su obligación es ser alternativa a Sánchez y no facilitar su investidura, Arrimadas reiteró que si Sánchez diera el primer paso Casado no tendría más remedio que sentarse a negociar.

Reclamó por ello a Casado «que no le dé excusas a Sánchez» para mantener su acuerdo con Unidas Podemos, porque «se puede ver obligado a explorar la vía constitucionalista». De hecho, apuntó, si fracasa su negociación con ERC «quizá se abra una oportunidad» de abrir esa vía.

(SERVIMEDIA)