La polémica ha saltado en China después de que saliera a la luz el dramático caso de Wu Huayan, una joven que durante los últimos cinco años solo se ha alimentado de arroz y chiles debido a su precaria situación económica, ha vivido con sos yuanes al día (menos de 0.50 céntimos de euro) y aún así, ha logrado cuidar de su hermano enfermo, terminar sus estudios y dar empleo a dos personas.
Los padres de Huayan murieron hace tiempo, y la joven, de 24 años tuvo que hacerse cargo de su hermano, quien padece una enfermedad mental que requiere de un costoso tratamiento.
Su caso salió a la luz cuando la joven fue trasladada a un hospital con un severo cuadro de desnutrición: medía apenas, 1,35 metros y pesaba 21,5 kilogramos, informó el diario estatal ‘Del Pueblo’. Además, Huayan, padece problemas de corazón y sufre pérdida de cabello, zumbidos en las orejas e insomnio. Tampoco puede caminar correctamente, y mucho menos costearse un tratamiento médico.
La mujer, residente en la provincia de Guizhou, recibe una ayuda estatal de 300 yuanes mensuales (40 euros) que destinaba para cubrir los costes del tratamiento de su hermano.
Miles de ciudadanos manifestaron su indignación y colaboraron con una campaña de donaciones que el fin de semana ya había reunido unos 470.000 yuanes (unos 65.000 euros).
