Malawi lanza una vacuna “piloto” contra la malaria que la OMS considera “histórica”

El Gobierno de Malawi lanzó este martes una vacuna “piloto” contra la malaria, bautizada con el nombre de RTS,S que es el resultado de 30 años de trabajo en el seno de un proyecto “histórico”, según la OMS, y que está enmarcado en el Programa Mundial de Malaria de esta organización, que dirige el español Pedro Alonso.

Así se puso de manifiesto en el transcurso de una conferencia de prensa celebrada en Ginebra en la que se anunció que esta vacuna, la primera y, hasta la fecha, única que ha demostrado que puede reducir “significativamente” la malaria en los niños, se pondrá a disposición de menores de hasta dos años de edad y se extenderá también a Ghana y Kenia en los próximos meses hasta alcanzar a unos 360.000 niños por año en los tres países.

Durante su intervención, Alonso subrayó que la malaria es uno de los “principales asesinos” de niños en África, ya que se cobra la vida de un niño “cada dos minutos”, principalmente en el África subsahariana, por lo que consideró el lanzamiento de esta vacuna como un “momento histórico” en la “muy larga” lucha contra esta enfermedad que cada año mata a más de 400.000 personas, la mayoría de ellas niños, por lo que la consideró “uno de los mayores problemas globales de salud a los que nos enfrentamos”.

El experto precisó que la implementación de esta inmunización en el sistema sanitario de estos tres países contará con un “fuerte componente” evaluativo así como con un programa de acompañamiento con recomendaciones e información sobre su uso, los beneficios y seguridad de lo que consideró un “éxito” de la comunidad internacional, producto de tres décadas de investigación por parte de GSK con la colaboración de la organización sin ánimo de lucro Path y una red de centros de investigación africanos.

Para Alonso, se trata de una enfermedad “muy dura y compleja”, por lo que abogó por no reducir los “esfuerzos” para acabar con ella y esperó que la nueva vacuna tenga un “impacto masivo” sobre la mortalidad.

EFICACIA

En la tercera fase de los ensayos realizados en África entre 2009 y 2014, los menores que recibieron las cuatro dosis de la vacuna experimentaron “reducciones significativas” de la enfermedad y sus complicaciones asociadas.

La inmunización previno cuatro de cada diez casos de malaria clínica, tres de cada 10 casos de malaria severa y seis de cada 10 casos de anemia severa por malaria, la razón más común por la cual los niños mueren de paludismo.

Los investigadores también observaron “reducciones significativas” en los ingresos generales al hospital y la necesidad de transfusiones de sangre, que se requieren para tratar la anemia grave por paludismo.

En cuanto al calendario de vacunación, en las áreas seleccionadas de los tres países, la vacuna se administrará en cuatro dosis, tres de ellas entre los cinco y los nueve meses de edad y la cuarta dosis, alrededor de los dos años.

La directora del departamento de Inmunización y Vacunas de la OMS, Kate O’Brien, estimó “emocionante” este nuevo hito de la lucha contra la malaria y recordó que es la “primera vez” que muchos niños africanos conseguirán una “protección eficaz” frente a esta enfermedad, por lo que también aseveró que se trata de un “momento importante” para la consecución de este reto. En este punto, apostó por mantener “en movimiento” a los socios de este “partenariado” al que agradeció su “liderazgo” y los “años de dedicación para llegar hasta aquí”.

En la misma línea, la responsable técnica del lanzamiento de esta vacuna, Mary Hamel, reconoció que se trata de una “oportunidad muy significativa” para mejorar la salud de los niños y para reducir la alta mortalidad que lleva aparejada el paludismo, por lo que felicitó a los tres gobiernos que la introducirán en su sistema sanitario.

El director de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, defendió que se necesitan “nuevas soluciones para volver a encaminar la respuesta a la malaria y esta vacuna brinda una herramienta prometedora” para lograrlo dado que, a su entender, “tiene el potencial de salvar a decenas de miles de vidas de niños».

Por su parte, la directora regional de la OMS en África, Matshidiso Moeti, reconoció que la malaria supone una “amenaza constante” en las comunidades africanas donde se administrará esta vacuna. “Conocemos el poder de las vacunas para prevenir enfermedades mortales y llegar a los niños, incluidos aquellos que pueden no tener acceso inmediato a los médicos, enfermeras y centros de salud que necesitan para salvarlos cuando se presente una enfermedad grave», dijo, al tiempo que remarcó que se trata de un día “para celebrar”, pues, a su juicio, esta vacuna se presenta como una “herramienta para cambiar la trayectoria de la malaria a través de la vacunación infantil».

Según informó al OMS, esta vacuna se agregará al paquete básico de medidas recomendadas por este organismo para la prevención de la malaria, incluido el uso rutinario de mosquiteros tratados con insecticida, la fumigación en interiores con insecticidas y el uso oportuno de las pruebas y el tratamiento de la malaria.

El programa piloto coordinado por la OMS es consecuencia de una colaboración con los ministerios de Sanidad de Ghana, Kenia y Malawi y varios socios nacionales e internacionales, incluyendo la organización sin ánimo de lucro PATH, y el desarrollador y fabricante de vacunas, GSK, que ha donado diez millones de dosis de vacunas para el proyecto.

La elección de Malawi, Ghana y Kenia se realizó atendiendo, entre otros criterios, a la presencia en estos países de programas contra la malaria y de inmunización que funcionaban bien y de áreas con transmisión de malaria “de moderada a alta”.