Los candidatos a la Presidencia del Gobierno no descartaron este martes, durante el debate de Atresmedia, la posibilidad de llegar a algún tipo de acuerdo sobre la política migratoria, aunque dejaron patentes algunas diferencias al respecto.
Fue el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, quien llamó a suscribir un “pacto de Estado”, aunque advirtió de que “el mayor aliado de la xenofobia es el buenismo”, en referencia a la política migratoria inicial de Pedro Sánchez al llegar a La Moncloa. Rivera abogó por potenciar la inmigración legal desde los países sudamericanos y que se combata a las “mafias” que trafican con seres humanos.
Por su parte, Sánchez defendió que hay que “reforzar el control de las fronteras”, pero que no se puede dejar “al pairo” a los inmigrantes que intentan llegar por mar a España y pueden perder la vida en ello. El secretario general del PSOE dijo que el actual Gobierno ha empezado a retirar las concertinas de Ceuta y Melilla, al tiempo que ha aumentado los medios de las Fuerzas de Seguridad para defender las fronteras.
«EFECTO LLAMADA»
Por su parte, el líder del PP, Pablo Casado, acusó a Sánchez de haber provocado un “efecto llamada” a la inmigración ilegal, cuando lo que hay que hacer es “reforzar las fronteras y al mismo tiempo ser solidarios”. Además, el responsable del PP defendió un plan de inversión en África para evitar que quienes viven en este continente tengan que emigrar a Europa para tener una mejor vida.
Asimismo, el candidato de Podemos a la Presidencia, Pablo Iglesias, se refirió a que para suscribir un ‘pacto de Estado’ sobre inmigración hay que tener en cuenta que cualquier acuerdo pasa por cumplir de “manera taxativa” los derechos humanos. Al mismo tiempo, el líder de la formación morada criticó los Centros de Internamiento de Extranjeros (Cies) y que el Gobierno socialista impidieran al barco ‘Open Arms’ salir al Mediterráneo para socorrer a inmigrantes.