El 88% de los españoles almacenamos información importante, confidencial y muchas veces irremplazable en nuestros aparatos como contraseñas, mensajes, fotografías, contactos y otros tipos de archivos. El 27% afirma, además, que guarda información en sus dispositivos que no le gustaría que nadie más viese, según una encuesta elaborada por Kaspersky Lab y B2B International sobre el uso del móvil y riesgos de seguridad.
Enfrentamos el móvil a robos o fugas de datos como contraseñas del banco y otros asuntos sensibles que guardamos en su memoria. Pueden ser hackeados o incluso, gracias a una incursión que no esperamos, podemos ser espiados en nuestras pequeñas o grandes miserias. Los dispositivos que usan redes WiFi abiertas son particularmente vulnerables a estos ataques. Sin embargo, poca gente toma medidas para reducir el riesgo.
7Comer y beber con el teléfono en la mesa

En la actualidad hay muchos smartphones que tienen tratamientos específicos para sus carcasa y pantallas que, de algún modo, impiden que las salpicadures o, directamente, una inoportuna zambullida en un vaso de agua o en la fuente de la sopa suponga el final de nuestro aparato.
Pero ojo, muchas más siguen sin tener esta anfibia característica... Y muy pocos comemos al sequillo con lo que siempre hay peligros en el momento de ingerir alimentos.Por esta razón nosotros recomendamos poner el móvil lejos de la mesa. Te puedes ahorrar más de un disgusto y además, si no comes solo, demostrarás mucha más educación y respeto por los demás comensales. ¿No te parece?