Director del Cervantes defiende la diversidad lingüística

El director del Instituto Cervantes ha defendido este jueves 24 de septiembre en Berlín (Alemania) la diversidad lingüística de España y ha insistido en que es necesario «comprender la enorme riqueza de vivir en un país con tantas lenguas».

En un encuentro con responsables de los organismos que fomentan el gallego, el vasco y el catalán, Luis García Montero ha afirmado que las lenguas cooficiales aportan «distintas formas de vivir el mundo que nos enriquecen» tanto a los respectivos territorios donde se hablan como a toda España. Ojalá, ha destacado, esos ciudadanos «que tienen la suerte de ser bilingües, no tengan la mala suerte de dejar de serlo».

En el marco del Día Europeo de las Lenguas, García Montero ha celebrado una reunión presencial de trabajo en el Instituto Cervantes de la capital alemana con la directora general del Libro, María José Gálvez; con las directoras del Consello da Cultura Galega, Rosario Álvarez, y del Etxepare Euskal Institutua, Irene Larraza, y con la delegada del Institut Ramon Llull en Berlín, Sílvia González.

Todos ellos han manifestado su deseo de coordinar estrategias entre las diversas instituciones para reforzar el multilinguïsmo de España, tal como se pactó el pasado 26 de mayo en el primer acuerdo de cooperación entre el Cervantes, el Ramon Llull, el Consello y el Etxepare.

La directora del Consello da Cultura Galega ha declarado tras el encuentro de este jueves que «la diversidad lingüística y cultural está en el ADN de Europa, pues es propia de los territorios largamente habitados por pueblos que crean lenguas, que evolucionan a lo largo de milenios en culturas propias».

Rosario Álvarez ha agregado que «las instituciones aquí representadas tenemos la firme voluntad de caminar juntas para mostrar, dentro y fuera de las fronteras del Estado español, la diversidad del impulso creativo de este mosaico de culturas y lenguas. El valor compartido desde las respectivas identidades, así como el respeto y aprecio mutuo, son la base de la convivencia democrática».

Por su parte, Irene Larraza ha elogiado el papel de institutos de lenguas no hegemónicas –como es el caso de Etxepare Euskal Institutua con el euskera– para que éstas «se conozcan, se reconozcan y se utilicen para lograr que sean lenguas de pleno derecho», porque «en una Europa basada en valores, resulta imprescindible aprender a entenderse no desde la homogeneidad, sino desde la diferencia».

Para la directora del Etxepare, «no es posible crear o ampliar comunidad si no es desde el aprecio a la diversidad, en todos los ámbitos». «Las personas hablantes o representantes de lenguas minoritarias y minorizadas, podemos sin duda aportar nuestra amplia experiencia en la gestión del multilingüismo», ha insistido.