De un tiempo a esta parte, las redes sociales se han convertido en un punto central de nuestras vidas. Allí acudimos a informarnos de la última hora. También lo usamos para entretenernos y socializar. Y algunas personas, también para dar rienda suelta a las infidelidades. Y es que es un refugio para muchas parejas que ven que su relación no va como al principio y buscan nuevas ilusiones en el ciberespacio.
En redes sociales todos podemos ser quien queramos. Podemos ser todo lo anónimos que nos propongamos e inventarnos la personalidad que queremos ser. Además, no estamos bajo el punto de mira de nadie y, en teoría, nadie va a sacar a la luz nuestras fechorías ni nadie va a decir a nuestra pareja los cuernos que tiene. De hecho, hay muchas empresas que han hecho de la infidelidad un negocio.
En esta lista os damos unas claves para que podáis descubrir si vuestra pareja es infiel y cuáles son las actitudes más comunes de estas personas, para que toméis nota.
El Teléfono
Hace 20 años el que más sabía de nosotros era nuestro médico de cabecera. Pero a día de hoy es nuestro propio teléfono el que más datos tiene acerca de nosotros. Allí tenemos nuestras aplicaciones de banco, nuestras aplicaciones de socialización y otras muchas herramientas útiles. Normalmente notaremos si nuestra pareja es infiel a través del uso del teléfono.
A veces, si la pareja no tiene secretos entre ambos, las claves que se utilizan son conocidas por ambos. Si tu pareja cambia la clave sin avisar, puede que no sea motivo de sospecha. Pero si observamos comportamientos extraños como alejarse de la pareja para hablar por teléfono, responder mensajes de WhatsApp yéndose a otra habitación, usar el móvil en la penumbra de la noche cuando se piensa que estás dormido… Ahí sí, empieza a tener sospecha acerca de unos posibles cuernos.
Las cosas siempre se pueden hablar y puede que tenga una respuesta lógica y que las sospechas sean infundadas, como, por ejemplo, algo que venía haciendo desde hace mucho tiempo. Sin embargo, si decides hablar las cosas y empiezas a ver motivos de alarma, nerviosismo, acusaciones de vulneración de privacidad o algo que no tenga lógica, quizás es que haya encontrado a alguien. Lo mejor es hablar las cosas.
Arreglarse más de la cuenta para cosas comunes
Normalmente, cuando en la pareja se está bien, no hace falta arreglarse para hacer cosas comunes. Una de las particularidades de conocer a alguien externo a la pareja, es que no se le pone cara al comienzo y todo queda en fotos y videollamadas. Pero para poder consumar la infidelidad, hay que quedar en persona.
Normalmente las parejas infieles utilizan momentos y acciones cotidianas para poder encubrir la infidelidad. Esto se hace para que el cornudo de los dos no sospeche y el otro tenga una coartada para salir de casa y dar rienda suelta a sus pasiones. Si de pronto la pareja empieza a cambiar algunos hábitos a la hora de ir a lugares donde normalmente no iba así, es momento de preguntar.
Por ejemplo, uno de los momentos más recurrentes para esto es ir a hacer la compra, pero en vez de ponerse el chándal, se pone una camisa y unos vaqueros, algo que nunca hacía. Y además se pone su mejor perfume. Es momento de sospechar. A veces es mejor hablar las cosas y aclarar todo antes de que unos cuernos lleven a otros conflictos peores.
Tinder, Badoo y otras apps
Volvemos al tema teléfono. Quizás tú no sepas que pueden camuflarse aplicaciones, pero pueden colocarse otros iconos y otros nombres a las propias apps. También puede suceder que esto no haga falta porque tú no sabes para que sirve Tinder, Badoo o Lovoo. Son aplicaciones de ligue, sin tapujos. Si ves que en su teléfono tiene ese tipo de aplicaciones, está claro para lo que son.
Quizás te pueda decir, cuando le preguntes, que últimamente no tiene muchos amigos y que solo quiere conocer gente. Lo más probable es que eso sea mentira y lo que busque es tener una aventura fuera de la pareja. Un amor furtivo que le alegre la vida fuera de casa. Sospecha siempre de esas apps porque nunca son para hacer amigos sanos ni para quedar con otra gente para jugar al fútbol.
Además, estas apps pueden llevar a sufrir algún delito. No es la primera vez que un hombre ha acudido al piso de una mujer a la que ha conocido por estas aplicaciones. Ya allí, ella le ha puesto algo en la bebida a él y posteriormente le ha robado tanto el dinero de la cartera como el de la cuenta bancaria, porque esta gente es profesional y sabe tus claves, porque a veces, el enamoramiento o el pensar que vamos a poder hacer otras cosas, nos hace desvelar nuestras claves, y en nuestro móvil, como decíamos antes, llevamos todo expuesto.
Fotos, Chats y videollamadas
Puede ocurrir que nuestra pareja tenga una aventura fuera del matrimonio, pero sea un experto ocultándolo. Si queremos ver si tenemos cuernos, son la galería de fotos, los chats de WhatsApp o Telegram o las videollamadas en donde podemos encontrar algún indicio. Quizás WhatsApp es un lugar muy expuesto ya que lo tenemos abierto la mayor parte del día y una miradita a ver con quién se habla puede desvelar algo que no queremos.
Por eso muchas personas deciden ir a Telegram a hablar con las amantes. Si no tiene Telegram y borra todos los chats, podemos ir a la pestaña de videollamadas. En las videollamadas se quedan guardados todos los contactos con quien ha tenido comunicación, aquí podemos ver si hay algún contacto extraño o número que no nos suene. Normalmente WhatsApp guarda una copia de seguridad de las fotos en una carpeta dentro del móvil, también podemos acudir allí a ver qué fotos ha sido las últimas que le han enviado. Esto se puede replicar con las notas de audio y esto es más difícil de borrarlo.
Si nuestra pareja es infiel en redes sociales, con estas pinceladas podemos saber si tenemos la cornamenta del toro que mató a Manolete y si estamos siendo traicionados por nuestra pareja.
