Si fuiste seguidor del programa, sabrás que ‘MasterChef 13’ fue de todo menos predecible. En una emisión marcada por las sorpresas y las personalidades únicas, el reality ya tiene a su la flamante ganadora, el talent culinario más popular de Televisión Española llegó a su final anoche. La ganadora lo ha hecho en un duelo que quedará en la memoria de los espectadores: frente a ella, otra concursante que fue subestimada durante semanas, pero que logró llegar al último programa con el título no oficial de “la mosquita muerta” de la edición.
Ambas finalistas llegaron a esta última etapa de ‘MasterChef 13’ con historias que engancharon y con un nivel técnico culinario que terminó sorprendiendo incluso al exigente jurado. La ganadora, además de enfrentarse a los retos habituales del concurso, lo hizo bajo un estado peculiar. Un detalle que no se interpuso en su rendimiento y se volvió un símbolo de constancia y fuerza.
1Gabriela y Bea, dos trayectorias inesperadas que marcaron la final de ‘MasterChef 13’

Durante las semanas que estuvo ‘MasterChef 13’ en pantalla, tanto Gabriela como Bea se consolidaron como perfiles atípicos dentro del formato. Gabriela ingresó al programa con un estilo sereno, su ejecución era precisa y su historia personal tocó a muchos. Su embarazo no impidió que compitiera manteniendo el más alto nivel, y demostró una fortaleza admirable en las pruebas más exigentes.
Por su parte, Bea mantuvo inicialmente un perfil bajo, pero su progresión fue constante. Contra todo pronóstico, sobrevivió a más pruebas de eliminación que ningún otro participante. Fue su capacidad de adaptación, la técnica que estuvo puliendo durante el talent culinario y su intuición lo que la llevó hasta la final. Su apodo de «la mosquita muerta» derivó de sus propios compañeros, quienes la subestimaron durante buena parte del concurso.