Aunque las clases sociales parecen un concepto propio de tiempos muy, muy pasados, la realidad es que la sociedad sigue dividida, aunque los límites entre las clases de alta, media y baja son más difusos que entonces. O al menos eso es lo que se desprende por parte del último análisis dela OCDE.
Porque una buena parte de la población considera que pertenece a esa famosa ‘clase media’ en la que nos podemos permitir algunos caprichos, pero sin pasarnos de la raya. De hecho, según un estudio desarrollado por el CIS, el Centro de Investigaciones Sociológicas, el 44,6% de los encuestados considera que pertenece a la clase media.
LA MAYORÍA DE LOS ESPAÑOLES NOS CONSIDERAMOS ‘CLASE MEDIA’, PERO NO ES UNA PERCEPCIÓN REAL, SEGÚN LA OCDE
El dinero, claro, juega un papel fundamental, pero no es el único factor a considerar. La OCDE, por ejemplo, ha desarrollado un método para clasificar a la población según sus ingresos, desde la clase baja, la clase media o la clase baja. Pero este enfoque, aunque útil, no captura la complejidad de un fenómeno social tan arraigado en nuestra cultura y nuestras relaciones sociales.
La percepción subjetiva de la propia posición social, las aspiraciones individuales y las desigualdades estructurales son solo algunas de las variables que entran en juego al intentar definir a qué clase pertenecemos.

Según las últimas cifras del Instituto Nacional de Estadística (INE), recogidas en 2024 a partir de los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA), el sueldo nacional español ha obtenido un aumento del 2,0%.
LOS INGRESOS DE CLASE MEDIA DEBEN SITUARSE ENTRE LOS 13.433 Y LOS 3581 EUROS MENSUALES
Aquí, y según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), la clase media está compuesta por aquellos hogares cuyos ingresos oscilan entre el 75% y el 200% de la renta familiar mediana. En 2025, la renta media mensual en España se sitúa en 1790 euros, lo que significa que los ingresos de clase media deben estar entre 1.343 y 3.581 euros mensuales.
Aunque este criterio establece un rango claro, existen variaciones a nivel local y regional. Por ejemplo, la renta familiar mediana en España se encuentra en los 18.316 euros anuales, por lo que, según el análisis de la OCDE, para que un hogar pertenezca a la clase media, los ingresos deben situarse entre los 13.737 y los 36.632 euros anuales. Mientras, por debajo, se colocaría a la clase baja, con ingresos inferiores a 11.395 euros, correspondientes a menos del 75% de la cantidad media.
LA CLASE BAJA SE ENCUENTRA BAJO PRESIÓN
Además de definir el rango de la clase media, la OCDE también determina los ingresos que caracterizan a las clases baja y alta. En términos de salario mensual, cualquier persona que gane menos de 1.343 euros al mes se considera de clase baja, mientras que quienes perciben más de 3.581 euros al mes se encuentran en la clase alta.
Estos valores se basan en la renta familiar mediana, pero no son absolutos. El costo de vida, la ubicación geográfica y la situación particular de cada hogar juegan un papel crucial en la clasificación de clase social.

Uno de los aspectos más preocupantes es que, a pesar de los ingresos relativamente estables de muchos españoles, la clase media se encuentra bajo presión. Desde 2015, el crecimiento de los ingresos de las clases medias ha sido más lento que el de las clases altas. La inflación y el aumento del precio de la vivienda en España han exacerbado las dificultades para muchos hogares que, a pesar de pertenecer a la clase media, sienten que su estabilidad económica está en peligro.
MÁS DE UNO DE CADA CINCO HOGARES GASTA MÁS DE LO QUE GANA
Así, y según los cálculos de la OCDE las clases quedarían definidas de la siguiente forma:
- Clase baja: hasta 11.395 euros anuales / menos de 1.343 euros mensuales.
- Clase media: desde 11.395 a 30.386 euros al año / entre 1.343 y 3.581 euros mensuales.
- Clase alta: a partir de 30.386 euros al año / más de 3.581 euros al mes.
La OCDE concluyó en su informe que la clase media se ha visto reducida en la mayoría de países debido a las dificultades de la población juvenil para llegar a los ingresos promedios de la clase media. “Mientras que casi el 70% de los baby boomers formaban parte de hogares de ingresos medios cuando estaban en su veintena, hoy solo el 60% de los millennials lo son”, especifica el organismo.
También resalta otra conclusión a tener en cuenta. Más de uno de cada cinco hogares de ingresos medios gasta más de lo que gana y el sobreendeudamiento es “mayor para ellos”. Por ello, la OCDE instó a los gobiernos a “mejorar el acceso a servicios públicos de alta calidad y garantizar una mejor cobertura de protección social”. Entre las medidas, citó la posibilidad de fomentar la oferta de viviendas asequibles.