Las lentes de contacto son colocadas directamente sobre la córnea del ojo de aquellas personas que tienen algún tipo de problema de visión y mejorarla, como sucede cuando se deben corregir errores de refacción, como la miopía, la hipermetropía o el astigmatismo.
También conocidas como lentillas, son la opción a la que recurren muchas personas que prefieren evitar el uso de gafas en su día a día, ya sea por comodidad o por estética. A pesar de que cumplen perfectamente con su cometido, la ciencia ha avanzado hasta crear unas lentes de contacto que permiten ver con los ojos cerrados y en la oscuridad.
4LENTES DE CONTACTO CON MUCHAS POSIBILIDADES
La investigación ha podido abrir el potencial que tienen dispositivos portátiles no invasivos para proporcionar «supervisión visual a las personas», tal y como destaca el autor principal, Tian Xue, neurocientífico de la Universidad de Ciencia y Tecnología de China.
El experto destaca que este material tiene muchas aplicaciones potenciales inmediatas, puesto que, por ejemplo, la luz infrarroja parpadeante se podría utilizar para transmitir información en entornos de seguridad, cifrado, rescate e incluso en la lucha contra la falsificación.
