El anuncio de hace unos días de Wegow, una de las grandes plataformas de venta de entradas para salas de concierto y una de las más usadas por artistas nacionales, ha sido recibido como un balde de agua fría por la industria local. En el texto de la empresa dejaban claro que entraban en un concurso de acreedores, precisamente porque no eran capaces de cumplir con todas las obligaciones que tienen con salas de conciertos, artistas y promotores de eventos.
Si bien ha sido un golpe complejo de encajar, la industria, o al menos el mundo de la música independiente, ha arrimado el hombro, y empieza a buscar soluciones para cubrir al menos una parte de los ingresos que se debían generar a través de la venta de entradas a través de este portal. Lo cierto es que grupos como la M.O.D.A., Alcalá Norte, Veintiuno o Shinova, así como locales como Maravillas o la Sala Vesta, solo por nombrar los de Madrid han dejado claras varias cosas: Primero que es un golpe, pues no saben cuándo recibirán el dinero de las entradas ya vendidas por la aplicación, ni si lo harán, y segundo que de momento todos los conciertos programados se mantienen en pie.
Al mismo tiempo, han recordado el reto que simboliza atravesar esta tormenta. La realidad es que se trata de una situación compleja de atravesar, y mientras que se intenta buscar una solución sobre el dinero de que ya ha recolectado Wegow, se han esforzado en promover otras formas de generar ingresos. Lanzamientos especiales de mercancía, precios especiales en restauración durante los eventos, y el señalar otras tickeras donde están disponibles las entradas, y que siguen pagando a los artistas.
De los casos documentados, el más dramático, o uno de ellos, es precisamente el de La M.O.D.A. También conocidos como La Maravillosa Orquesta del Alcohol la banda de Burgos que combina el folk con sonidos más del indie pop, ellos empiezan en noviembre una gira de casi 30 fechas, varias de ellas agotadas, todas ofrecidas de forma exclusiva con Wegow. De momento informan que la plataforma no entrega el dinero, pero que las entradas compradas por la misma seguirán siendo válidas y que el resto las venderán a través de otras tickeras.
LA VENTA DE MERCANCÍA Y LOS VINILOS COMO SALVAVIDAS
De momento, la venta de mercancías, y de discos en formato físico, sigue siendo un salvavidas útil para los artistas. Es cierto que no resuelve la crisis actual, pero es señalada por varias instituciones como una forma de dar apoyo en medio de una situación especialmente delicada, que para algunos de ellos llega justo después de haber decidido boicotear alguno de los festivales españoles controlados por KKR, lo que también tiene un costo económico, que asumieron por convicción antes de que explotara una nueva crisis.
En cualquier caso, también es importante seguir de cerca los anuncios de nuevas fechas con otras tickeras que sirvan para tapar el hueco que ha dejado la situación de Wegow. Es cierto que los conciertos también tienen un costo, pero para algunos grupos y artistas involucrados pasearse por algún festival puede ser la única solución en el corto plazo, asumiendo que el festival sea capaz de pagar de frente y no genere un costo demasiado alto para el artista por la necesidad de viajar.
WEGOW SIN GRANDES OPCIONES PARA SOBREVIVIR A FUTURO
Por otro lado, la situación de Wegow, asumiendo que salga bien parada del concurso de acreedores, no pinta demasiado bien. El anuncio, y el retraso en los pagos, ha sido suficiente para romper la relación de confianza con varios artistas, y varios dejaron de lado la venta de entradas de sus giras actuales en la plataforma, pasando a otras a opciones, y no es probable que intenten mantenerse en ella.
Entre los artistas que han tomado esta decisión están, además de La M.O.D.A., Rufus T Firefly o el festival Canela Party. Se suman, por supuesto, los grupos que no han hablado de la situación por consejos legales, una de las cuales informó en El País que la tickera les adeudaba unos 200.000 euros. De todos modos, con el concurso de acreedores abierto en Wegow tienen 4 meses para buscar una solución, pero de momento no se vislumbra ninguna.