Especial 20 Aniversario

Rodri regresa y pone las cosas en su sitio: amenaza al Real Madrid para el Mundial de Clubes

El Manchester City -con Rodri– consiguió una victoria sólida en casa frente al Bournemouth (3-1), un triunfo que va mucho más allá de los tres puntos. Además de dejar al equipo a un paso de clasificar a la próxima Champions League, el encuentro significó el regreso de Rodri Hernández, quien volvió a jugar tras una ausencia de ocho meses.

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El retorno del mediocentro español no solo fue un momento cargado de emoción para la afición del Etihad, sino también una señal clara y es que el City recupera a su pilar justo cuando más lo necesita. Con el Mundial de Clubes en el horizonte y el Real Madrid como posible rival, el mensaje fue directo. El campeón europeo no ha dicho su última palabra.

Rodri Hernández
Fuente: Agencias

La temporada del equipo de Pep Guardiola ha tenido altibajos. La reciente eliminación en la FA Cup dejó un sabor amargo, pero esta victoria sirvió como bálsamo. Aunque en el papel el Bournemouth parecía un rival menor, el calendario engañoso de este tramo final de campaña obligaba a no subestimar. Y el City no lo hizo. Mostró carácter, autoridad y, sobre todo, volvió a sonreír con su timón en el campo.

Una victoria necesaria para encarrilar la Champions

La noche en el Etihad arrancó con un claro mensaje desde el minuto uno. Omar Marmoush abrió el marcador con un golazo desde fuera del área, una joya que rápidamente encendió al estadio y encarriló el partido para los locales. Desde ahí, el dominio fue casi absoluto. El City tomó el control del balón y del ritmo, aunque hubo momentos curiosos como el insólito fallo de De Bruyne frente al arco vacío. Aun así, el equipo nunca perdió el hilo del juego.

Bernardo Silva amplió la ventaja antes del descanso, culminando una jugada brillante iniciada por İlkay Gündogan. El Bournemouth, por su parte, tuvo sus momentos, especialmente con una clara chance de Evanilson que terminó en el poste. Sin embargo, el City mantuvo el pulso firme y nunca dio la sensación de perder el control.

El segundo tiempo trajo más emociones. La expulsión de Kovacic encendió las alarmas, pero poco después Lewis Cook vio la roja directa y devolvió el equilibrio numérico. Con todo bajo control, el City cerró filas y manejó el partido con inteligencia.

El regreso de Rodri, más que un símbolo, una advertencia

Corría el minuto 82 cuando Rodri se acercó a la línea de banda. El Etihad explotó en aplausos. Ocho meses después de una complicada lesión de rodilla, el mediocampista español volvió a pisar el césped. Su entrada no fue simbólica. Fue la recuperación de una pieza clave en el engranaje de Guardiola.

El último partido de Rodri había sido el 22 de septiembre de 2024. Desde entonces, su ausencia se hizo sentir. El equipo perdió equilibrio, presencia y hasta resultados, como se vio en la caída frente al Crystal Palace en la FA Cup.

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Rodri no es solo un mediocentro. Es una figura de liderazgo, un jugador que organiza, empuja y da sentido al fútbol del City. Volver justo antes del Mundial de Clubes no puede ser casualidad. Es la señal de que el equipo apunta a todo. Con el Real Madrid como posible rival, tener a Rodri en plena forma representa un factor diferencial. Y lo que mostró en pocos minutos es que está entero, con ritmo y con hambre de protagonismo.

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