La llegada de Xabi Alonso al banquillo del Real Madrid no solo abre una nueva era en la Casa Blanca, sino que también revive viejas heridas en la gestión deportiva del club. Una de ellas tiene nombre y apellido: Álvaro Carreras. El lateral izquierdo gallego, descartado por La Fábrica en 2020 sin dejar un solo euro en caja, está cerca de volver al Bernabéu por una cifra que rondaría los 50 millones de euros.
En su momento, el joven formado en el Racing de Ferrol no encontró espacio en la estructura del club y se marchó en silencio. Cinco años después, tras destacar en Inglaterra y explotar en Portugal, su nombre vuelve a sonar con fuerza en los despachos de Valdebebas. Y lo hace por pedido directo de Xabi Alonso, que lo considera pieza clave para su sistema.

El técnico tolosarra, que apuesta por una defensa de tres centrales con carrileros largos, ha puesto a Carreras en su lista de prioridades. La operación avanza con el Benfica, pero cada paso hacia el acuerdo deja al descubierto un error que el club intenta corregir con dinero. Dejar ir demasiado pronto a un talento de casa.
Una salida sin retorno… hasta ahora
Álvaro Carreras llegó al Real Madrid con solo 14 años y un futuro prometedor. Sin embargo, en 2020, y sin oportunidades para debutar con el primer equipo, el club decidió no renovarle. El Manchester United aprovechó la oportunidad y lo incorporó para su filial. Allí, el lateral comenzó a destacar en la Sub-23, sumó minutos en el Preston North End y luego se fogueó con regularidad en el Granada, donde mostró su evolución.
Fue entonces cuando apareció el Benfica, que lo fichó por 6 millones de euros y le dio protagonismo en su equipo principal. El salto de calidad fue inmediato. Carreras brilló en la liga portuguesa y dejó su huella en la Champions League, donde fue una de las revelaciones del torneo. Su velocidad, su capacidad para recorrer toda la banda y su madurez defensiva llamaron la atención de grandes clubes de Europa.
Paradójicamente, el que más se interesó fue el club que lo dejó marchar. Con Xabi Alonso al frente del nuevo proyecto, el Real Madrid quiere repescar a un futbolista al que ya no le pesan los focos. El vasco ve en él el carrilero ideal para implementar su modelo, y por eso ha pedido expresamente su incorporación.
La eterna búsqueda del sucesor de Marcelo se le suma a Xabi Alonso
Desde que Marcelo dejó el Real Madrid, el club ha probado varias opciones sin encontrar un lateral izquierdo de garantías. Primero fue Ferland Mendy, con buenos momentos pero muy limitado por las lesiones. Luego llegó David Alaba, que acabó reconvertido en central, y más tarde Fran García, que ha mostrado importantes debilidades en defensa. En más de una ocasión, incluso Camavinga fue utilizado como parche en esa zona, una solución de emergencia que evidenció aún más la falta de planificación.
Ninguno logró consolidarse, y por eso la directiva busca un perfil diferente, uno que encaje mejor con la idea ofensiva de Xabi Alonso. Carreras encaja perfectamente. Su proyección ofensiva, su recorrido y su inteligencia táctica lo convierten en una opción ideal para ser el carrilero zurdo del nuevo Madrid.
El problema, claro, es el precio. El Benfica pide entre 40 y 50 millones de euros, y parte de esa suma irá al Manchester United, que conserva una cláusula por beneficio de futura venta. El Madrid de Xabi Alonso, entonces, deberá pagar una factura alta por su falta de paciencia con la cantera. Una historia que ya se ha repetido con nombres como Hakimi, Llorente o Morata, y que ahora amenaza con volver a cobrar caro.