¿No te gustaría probar una forma diferente de cheesecake? ¿Digamos que en forma de galleta? Actualmente, las galletas son uno de los pilares de la oferta de desayunos y meriendas a cualquier edad en muchos hogares españoles, particularmente de los niños, tal y como lo fueron para nuestros antepasados.
Se cree que esta costumbre viene desde la vida nómada de nuestros antepasados, hace 10.000 años, cuando se dieron cuenta de que podían crear un alimento que fuera fácil de transportar, alto en energía y similar en consistencia al pan cocinando una pasta hecha de cereales. Sigue leyendo para que te enteres muchas otras cosas interesantes y de la receta que hoy te traemos.
10Revisa los ingredientes y si tiene aceite de palma, mejor no
La mayoría de las galletas comerciales son elaboradas con aceite de palma, que ciertamente es el aceite vegetal más producido en el mundo, debido a su dominio en la industria alimentaria, pero no es para nada sano. De hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha podido establecer una especie de relación entre su consumo y los riegos que corre la salud de los consumidores, incluyendo el aumento de enfermedades respiratorias, cardiovasculares, oculares y de la piel, así como muertes prematuras.