El cuerpo humano es un complejo sistema, que involucra -entre muchas otras cosas- órganos, piezas, o partes, que interactúan para permitirnos, no solamente existir, sino también funcionar e interactuar con el mundo. Son fundamentales: si alguna de ellas falla, todo el cuerpo es afectado en su normal funcionamiento. Pero también es verdad que algunos de ellos tampoco es que tengan una utilidad provechosa.
De hecho, los hay que, simplemente, no sirven para nada. Es en lo que nos centraremos hoy; órganos que contamos en nuestro cuerpo que no tienen una función concreta como tal y, sin embargo, no eliminadas por la evolución. Se pueden contar por varias, quizás el más sonado de estos órganos sea el apéndice. Pero hay varios más. Los repasamos.
3El bazo, entre los órganos menos utilitarios
Otra muestra de estos órganos, y que más protagonistas se hacen entre las diferentes partes del cuerpo que no tienen ningún uso, se encuentra el bazo. Como tal, esta es una víscera pequeña que tenemos en el abdomen.
El suyo, en su caso, lo único que hace es aumentar de tamaño (esplenomegalia) con infecciones, como la mononucleosis o más raramente la malaria, enfermedades del hígado y algunos tumores.
Y en este caso se pueden sufrir infecciones frecuentes, anemia o sangrado. Incluso puede romperse y poner en riesgo la vida. En caso de quitar el bazo por un traumatismo, el único problema que va a tener la persona es que se va a quedar con menos defensas frente a bacterias. ¿Se puede vivir sin bazo? Sí; el motivo es que el hígado recicla los glóbulos rojos y sus componentes. Y de modo similar, otros tejidos linfáticos del cuerpo colaboran con la función inmune del bazo.





