No es ningún secreto. A día de hoy, el Real Madrid sigue teniendo una losa con Isco. Y eso se ha demostrado en este inicio de curso. Porque si bien el malagueño ha podido disfrutar de algunos minutos en pocos partidos, el mediocampista sigue figurando entre los descartes de Zidane. Eso ha hecho que el jugador se replantee también su marcha en busca de un futuro mejor.
Todo porque, en cierta medida, el rendimiento del futbolista está dejando mucho que desear a las órdenes del técnigo galo. Una bajada de juego que ya experimentó con Solari, donde nunca hubo conexión ni solución posible. Con el paso dle tiempo esto no ha hecho más que incentivarse, y ahora el jugador ya busca nuevos equipos donde poder desplegar su buen fútbol (que aún le queda). Repasamos los motivos de su marcha.
7En Chamartín saben que no pueden regalarlo
Por último, y como algo a prestar atención, es que el curso pasado Isco acabó con 30 partidos y tres goles en el Real Madrid. Un lugar fuera del alcance de aquel jugador que llegó en 2013 a las filas de un equipo blanco que tenía en él una de sus mejores bazas en el campo.
Por lo que ahora es obvio que con eso el de Benalmádena no se puede conformar. Titular en Cardiff y Kiev, inolvidable en Lisboa y también importante en San Siro, su estatus no se corresponde con su situación actual.
Hablamos de un jugador que puede ser determinante y que en este Real Madrid no tiene pinta de que pueda volver a serlo. Su sueldo es de 6,5 millones de euros netos. El club, con el regreso de Martin Odegaard, lo pone en el mercado con la única idea de que no hay que regalarlo. Por ello, optan porque la mejor decisión sería que se fuese ahora y no cuando agote su contrato en 2022, y que pudiese irse libre. Actualmente tiene un precio de mercado de 30 millones de euros.





